Así, mediante las medidas puestas en marcha se difunden las obligaciones indicadas en el Real Decreto del Ministerio de Medio Ambiente, en vigor desde 2005, tanto hacia los ciudadanos como hacia los comerciantes, que desconocen en buena parte esta normativa.

Una de las acciones a realizar consiste en la difusión de hojas informativas que explican como hay que tratar los RAEES de forma adecuada. Ya se han enviado más de 800 folletos a diferentes comercios aragoneses. Por este medio se pretende transmitir la idea de que estos aparatos no pueden ser arrojados a la basura simplemente, ya que contienen componentes tóxicos, perjudiciales tanto para personas como para el medio ambiente.

Además de los grandes aparatos eléctricos, como las lavadoras o los frigoríficos, los cuales suelen devolverse a las tiendas, al comprar uno nuevo, el problema está en otro tipo de aparatos, como una plancha de pelo, un teléfono o un secador, los cuales parece que estén 'olvidados', pero también contaminan el medio ambiente, igual o más que los grandes aparatos.

Los comerciantes, por su parte, están obligados a recoger los aparatos que ya no se usen, cualquier producto de la misma gama, aunque no sea de la misma marca; una práctica poco extendida hasta el momento. Otra opción al final de la vida útil del aparato es depositarlo en uno de los 'puntos limpios' que hay en Aragón; en la ciudad de Zaragoza, son cinco los puntos disponibles. Si no se puede acudir a estos puntos, también existe un programa de recogida, se trata de unos puntos móviles que pasan por una serie de calles a unas determinadas horas, que se llevan los aparatos viejos.

Los folletos informativos también se acompañan de un documento audiovisual explicativo que puede verse en la página del OMA, donde también se podrá realizar cualquier tipo de consulta acerca de los RAEES y de su reciclaje.