Reutilización y reciclaje de neumáticos, alternativas legales al vertedero
Los llamados cementerios de neumáticos fueron declarados oficialmente ilegales a partir de 2006, con el Real Decreto 1619/2005. La normativa establece un mecanismo de reciclaje obligatorio de neumáticos utilizados a través de un proceso en dos líneas.
Puede ocurrir que el neumático pueda vuelva a tener vida propia. Los llamados sistemas integrados de gestión, son los que establecen si un neumático es apto para ser reutilizados o tiene que ser reciclado. Si puede ser recauchutado, es decir, reparado, podrá volver a la carretera, siempre y cuando cumpla los mismos estándares de calidad de las ruedas nuevas. Los neumáticos más grandes, por su valor, son los que suelen recuperarse con mayor frecuencia. Cada año las ruedas usadas que tienen nueva vida son unas 300.000 en los coches, y unas 600.000 para camiones y autobuses, según datos facilitados por la Asociación Española de Neumáticos Reciclados. La normativa establece un mecanismo de reciclaje obligatorio de neumáticos utilizados a través de un proceso en dos líneas.
Si las gestoras detectan que el neumático no tiene ningún futuro porque está muy deteriorado, tiene que ser reciclado. Se aplicará un proceso de destrucción y descontaminación que llevará a la rueda a convertirse en calzado, guantes o césped artificial. Solo cuando es imposible este tratamiento, se envían las ruedas a la quema.
Miguel Ángel Cuerno, presidente de la Asociación Nacional de Recambistas del Automóvil (ANCERA) y de la Organización Profesional de Especialistas del Neumático (OPEN) especifica que el problema se da cuando son los mismos usuarios los que sortean el sistema. Esto ocurre cuando en lugar de ir a los talleres, los conductores compran ruedas por Internet o en los supermercados, para ahorrarse el coste de la mano de obra en un taller, detalla.