Gracias a la recogida neumática los 118 buzones de recogida (repartidos en 35 localizaciones) reemplazaron a los tradicionales contenedores de basura. Esta sustitución dejó un mayor espacio para el tránsito de peatones, disminuyó el problema de olores y evita el ruido y contaminación de los camiones de recogida.

Además del casi 90% de residentes satisfechos con la recogida neumática, un 78% de las personas entrevistadas manifiesta no tener problemas a la hora de depositar los residuos en los buzones.

En cuanto a la valoración de la estética, un 91% de los encuestados considera que los buzones están “bien o muy bien”, en comparación con el 68% que evaluaba de ese modo a los contenedores. En referencia a la opinión de hosteleros y comerciantes, un 64% considera que estos buzones presentan un mejor aspecto que los antiguos, para un 16% son iguales y un 19% consideran que son peores.

Los buzones de recogida tienen en su embocadura superior un sistema de tambor giratorio que permite que la carga caiga y se deposite en las tuberías verticales que tienen tres metros de profundidad media. Los buzones disponen asimismo de una compuerta específica, de mayor capacidad, –cuya apertura se realiza con una tarjeta personalizada– que facilita el depósito de envases y materia orgánica a los grandes productores (comerciantes, hosteleros, servicios educativos, sanitarios, residencias y sociedades). Para el papel y cartón de comerciantes existe una recogida puerta a puerta.

A lo largo de estos primeros 12 meses, se han recogido mediante el sistema neumático 2.472.190 kg. de residuos. De ellos, 1.868.000 kg. correspondieron a la recogida de materia orgánica y resto, 240.340 a envases y 363.850 a papel y cartón. Se estima que en las próximas etapas se instalen 15 puntos de recogida más en el Casco Antiguo y en el I Ensanche de Pamplona.