El 24 de febrero de 2016, Xan Duro, concelleiro de Medio Ambiente e Convivencia de Santiago de Compostela; daba por comenzada la segunda fase de la iniciativa Tropa Verde confirmando que la ciudadanía compostelana apuesta por el reciclaje. Una de las líneas definidas esta vez, era el foco en los colegios locales, la concienciación de los más pequeños. Y ésta es exactamente la propuesta de “Reciclar en la escuela tiene premio”, el nuevo conjunto de actividades de esta ya revalidada propuesta ecológica. 

Los resultados después de la primera fase de campañas de Tropa Verde en los colegios son algo más que una buena señal, son un par de pasos hacia adelante. En este caso la propuesta consistía en la recogida de aceite usado para su posterior reciclaje. Los niños de quince de los centros de primaria de la capital gallega se lanzaron a competir por ser la clase y el centro más verdes de la clasificación. Esto no sólo resultó en 2.356 litros recogidos o en 2.356 millones de litros de agua (alrededor de 1.500 bañeras) salvados de ser contaminados; sino también en la ilusión de los jóvenes participantes por colaborar en una transformación ecológica y social.

La tercera parte implicada, junto con el Concello de Santiago, colaboración protagonizada en especial por su dirección de educación, y de los colegios participantes; es Teimas Desenvolvemento. La compañía, promotora del proyecto, es la encargada tanto de desarrollo de su base tecnológica, como de las actividades de dinamización a pie de escuela. Sin embargo también es preciso resaltar el importante papel que tienen en Tropa Verde las asociaciones vecinales, Urbaser, los comercios locales... Y esta vez, también los recolectores PMA Nutrigas y Compostela Inserta, encargados de proporcionar los contenedores para el aceite y de realizar la recogida de los mismos.

Si bien en la competición hubo un justo ganador, el CEIP de Roxos, el que además de contar con la clase con mejor porcentaje de recogida, también alcanzó el top de la lista de colegios: 302 botellas recogidas y nada menos que un ratio de 2,59 botellas por alumno. Participar es ganar, y más cuando se trata de aprender sobre la naturaleza. Más de 2.000 alumnas y alumnos participaron en este concurso a fin de descubrir el reciclaje de manera práctica y sus fundamentos teóricos, gracias a los talleres de Tropa Verde en sus aulas.

La historia se repite, así como ya estamos en la segunda fase de Tropa Verde, tal como acabó la primera campaña de “Reciclar en la escuela tiene premio” está en marcha la segunda. Esta vez gracias a la colaboración de la Asociación Adén y del gestor de residuos autorizado Taxileón-Logiraees, el objetivo de los pequeños recolectores, serán los aparatos electrónicos. Las expectativas crecen. No se tardará en saber si el título a los mejores recolectores será revalidado o si habrá sorpresas.