Cantabria afirma que los residuos de Guipúzcoa cumplen las exigencias ambientales
De este modo, la empresa pública responde a las declaraciones de la asociación ecologista Arca, que ha expresado su oposición al acuerdo suscrito entre MARE y el Consorcio de Residuos de Guipúzcoa, alegando que se trata de un vertido "irregular" y que se está produciendo "al margen de la normativa, ya que no se trata previamente".
Desde MARE se señala que los residuos que en la actualidad está depositando Guipúzcoa en Meruelo, provienen de una segregación en origen realizada por el ciudadano, al tener implantada la recogida en cinco contenedores: materia orgánica, envases ligeros, papel cartón, vidrio y fracción resto.
Los residuos que se depositan en el contenedor fracción resto, aquellos que por su naturaleza no han sido depositados en el resto de contenedores para su reciclaje, constituyen la fracción que en la actualidad se está depositando en el vertedero de Meruelo, explica MARE en un comunicado de prensa.
La empresa pública insiste que el residuo, antes de su vertido en Meruelo, es sometido a una compactación que consiste en un tratamiento previo físico, que permite la reducción de su volumen y en menor medida del peso, al eliminar en este proceso posible presencia de agua en los residuos.
De acuerdo a la autorización ambiental integrada de Meruelo, la cual rige la gestión que MARE realiza del vertedero, en el apartado de condiciones y controles para la recepción e inspección de residuos, se indica que los residuos de carácter urbano que lleguen al vertedero deberán someterse a un "triaje previo o segregación selectiva".
De esta manera se procede a separar los residuos que constituyan o contengan fracciones valorizables. Además, sólo podrán depositarse en el vertedero, para su eliminación, residuos que hayan sido objeto de algún "tratamiento previo" de acuerdo al Real Decreto 1481/2001.
MARE añade que de acuerdo a las definiciones del citado decreto, por el término "tratamiento previo" se entienden "los procesos físicos, térmicos, químicos o biológicos, incluida la clasificación, que cambian las características de los residuos para reducir su volumen o su peligrosidad, facilitar su manipulación o incrementar su valorización".
Por ello, MARE "considera que los residuos que e están depositando en el vertedero cántabro cumplen con las exigencias que fija la autorización ambiental integrada y cumplen estrictamente con los requisitos fijados en la normativa".
Parala empresa pública, la asociación ecologista "únicamente busca cuestionar el acuerdo" suscrito entre MARE y el Consorcio de Residuos de Guipúzcoa, ya que desde el pasado 10 de febrero, fecha en la que Arca solicitó a la Dirección General de Medio Ambiente un informe para detallar las toneladas que se iban a verter, la vida útil del vertedero y el tráfico de camiones, y sin haber recibido el resultado del informe, ya aseguraba que el "acuerdo era rotundamente malo desde el punto de vista medio ambiental".
Para MARE, este "empecinamiento" de la asociación ecologista "lo único que demuestra es la tendenciosidad de sus intenciones desde un principio".