Proyecto 'SCOW', Europa busca la recogida selectiva de materia orgánica
El Scow, financiado por la Unión Europea y con apoyo de la Agencia Catalana de Residuos, ha puesto en marcha 14 plantas de compostaje de pequeña escala en seis países --España, Francia, Italia, Malta, Palestina e Israel--, con capacidad para 8.200 toneladas anuales y que, a partir de 2016, recogerán cerca de 2.300 toneladas de compuesto al año para usos agrícolas y de jardinería.
La jefa del departamento de Residuos de la BCNecologia, Marta Vila, ha explicado que el Pallars Sobirà ha acogido una de las plantas --la única a nivel español--, que ha contado también con un programa de recogida puerta a puerta de residuos, de formación de ciudadanos y productores agrícolas, además de dotar a los municipios de recursos de recogida adecuados para el proceso.
Uno de los resultados ha sido la creación del Medcompost, una red para mejorar la gestión de la materia orgánica a escala mediterránea --operativa a partir de 2016-- con el objetivo de promover iniciativas prácticas que mejoren la gestión de los bioresiduos, potenciar la comunicación y el intercambio entre sus miembros y los entes responsables de la gestión.
MATERIA ORGÁNICA, CLAVE
Salvador Rueda, director de BCNecologia, ha destacado que la materia orgánica es un elemento clave y la "columna vertebral" de la gestión de residuos, sobre todo en los países del mediterráneo --donde los suelos sufren desertificación--, ya que es muy aprovechable, pero si no se recoge bien puede contaminar los suelos y generar gases de efecto invernadero.
"Si usáramos los residuos orgánicos de Catalunya para energía, podríamos hacer funcionar todo el transporte público del territorio", en el que hay muchos purinos, ha afirmado Rueda, y ha añadido que la buena gestión de los residuos urbanos también apaciguaría la desertificación y reduciría los gases de efecto invernadero.
PRUEBA PILOTO EN EL PALLARS
Vila ha explicado que el proyecto --que ha contado con cinco millones de euros de financiación en toda Europa y de cerca de 400.000 en Catalunya-- ha logrado los objetivos de conseguir altos beneficios con baja tecnología y bajo coste, haciendo sus acciones sostenible en el tiempo, por lo que esperan exportarlo al resto del territorio catalán.
El Pallars, que se eligió por sus características rurales y turísticas, ha contado con la participación de 13 municipios y 24 núcleos de población, que han visto incrementar la recogida selectiva del 32% al 80% en las zonas de puerta a puerta, entre marzo y octubre, ha destacado el técnico de medio ambiente del Consorcio Comarcal del Pallars, Marc Sans.
En declaraciones, Vila ha estimado que en estos territorios se ha conseguido separar entre el 80% y 90% de la materia orgánica que se calcula que se genera, un elemento de selección previa clave para el programa, que ha logrado cifras de menos del 5% de residuos impropios --siendo el 10% la cifra aceptable--.
La planta financiada por el Scow en Lleida acepta 750 toneladas anuales y generará 120 toneladas de compuesto.