Así figura en la Memoria de Sostenibilidad que ha publicado este grupo de empresas de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), en la que se pone de relieve que el pasado año este grupo continuó calculando su “huella de carbono” para cuantificar las emisiones de gases de efecto invernadero de sus empresas.

Así, esas emisiones alcanzaron en 2015 las 39.018 toneladas de dióxido de carbono, lo que supuso un aumento del 14,8% respecto al año anterior, aunque este grupo empresarial ha observado que eso se debió al aumento de la actividad productiva, que hizo que la cifra de negocio del grupo se incrementase en un 42,5%.

Respecto a la gestión de los residuos, Tragsa consiguió el pasado año una reducción del 68% en los residuos no peligrosos respecto a las cifras del año anterior, sobre todo a la mejor clasificación de restos procedentes de construcción y demolición. Pese al aumento de la actividad productiva, la generación de residuos peligrosos aumentó solo el 3%, ha destacado Tragsa.

En 2015 se llevaron a cabo más de trescientas actuaciones relacionadas con la conservación de la flora y fauna silvestre y con el mantenimiento de los espacios naturales. Durante el pasado año Tragsa realizó servicios de apoyo a la gestión de los parques nacionales y a numerosas “fincas patrimoniales” que son gestionadas por el Organismo Autónomo Parques Nacionales, y siguió además trabajando, junto a este organismo, en el Plan de Sensibilización y Voluntariado en la red de Parques.

Este plan es una herramienta de educación ambiental que canaliza la iniciativa social de participación, con el fin de promover un cambio de actitudes en la sociedad mediante actuaciones que apoyan la conservación del medio natural.