La iniciativa DEMOS de COTEC selecciona tres proyectos sostenibles en comunidades rurales
Las localidades de A Rua (Ourense), Bugedo (Burgos) y Cuevas del Becerro (Málaga) acogerán durante los próximos dos años los tres proyectos de economía circular seleccionados por el proyecto DEMOS de COTEC, una iniciativa que cuenta con el apoyo de IKEA y que medirá el impacto social, económico y ambiental de la economía circular en tres comunidades rurales de menos de 5.000 habitantes, según ha anunciado COTEC.
Los tres proyectos seleccionados (Ruagua, Naturalia Bureba e Innovación gastronómica) fueron escogidos entre nueve finalistas (de un total de 162 candidaturas, procedentes de 16 comunidades autónomas y 42 provincias) el pasado 31 de marzo y recibirán ayudas de 300.000 euros.
Respecto a los proyectos, Ruagua (realizado por el consorcio de Aguas de Valderroas) tiene como objetivo garantizar la disponibilidad de agua durante épocas de sequía y reducir el estrés hídrico en este entorno rural. De esta manera, el proyecto cuenta con un enfoque circular basado en tres ejes: generación de agua regenerada, uso de energía solar como fuente renovable y producción de compost a partir de las aguas residuales generadas en A Rúa.
Por otro lado, Naturalia Bureba (creado por la asociación Aspodemi) propone la creación de una planta de compostaje de 560 toneladas al año en la comarca burgalesa de La Bureba, para la gestión de biorresiduos urbanos, ganaderos y agrícolas, así como la explotación intensiva de lombricultura, para la obtención de vermicompostaje (fertilizante orgánico para la recuperación de suelos). En este sentido, este proyecto aspira a gestionar los residuos vegetales de la zona y al mismo tiempo prestar atención domiciliara a personas mayores, mediante la recogida de residuos puerta a puerta.
Por último, Innovación Gastronómica (realizado por la asociación agroecológica Extiercol) quiere impulsar en el municipio malagueño de Cuevas del Becerro un proceso de innovación socio-ecológica a partir de la construcción colaborativa de platos territorializados, lo que implica establecer la construcción de los platos como elemento integrador del territorio, la alimentación sana y el desarrollo local, un elemento cohesivo que permita cambiar la forma de concebir el territorio y la alimentación, construido entre todos los actores locales.
[Este contenido procede de Europa Press. Lee el original aquí]