El incendio en la planta de reciclaje de Chiloeches está controlado pero no extinguido
Controlado pero no extinguido. Así está, 72 horas después de originarse, el incendio en la nave de reciclaje de productos químicos (Kuk Medioambiente S.L) en el polígono industrial Albolleque de Chiloeches.
Esta noche han permanecido en la zona 103 efectivos que siguen trabajando para poder extinguir el fuego lo antes posible. Según señaló ayer a última hora de la tarde el delegado de la Junta en Guadalajara, Alberto Rojo, durante el domingo se avanzó mucho en esas tareas.
Hasta el lugar se ha desplazado maquinaria pesada especializada en el derribo de naves metálicas para retirar la estructura de la planta, que ha quedado totalmente arrasada por las llamas durante las más de 72 horas que dura ya el incendio.
Y mientras se trabaja en la extinción, se siguen realizando mediciones del aire. Hasta ahora, los parámetros registrados en las dos estaciones de medición fijas de Guadalajara y Azuqueca de Henares, las realizadas en la estación móvil desplazada al incendio y las hechas por técnicos de la UME en la zona arrojan "datos normales y, por tanto, no hay peligro para la población", según la Junta. El delegado recordaba las recomendaciones que han venido repitiendo en las últimas horas.
El delegado ha precisado que, una vez que se extraigan todos estos lodos, una empresa especializada realizará un estudio de contaminación del suelo para determinar las medidas necesarias para limpiar los restos del vertido.
AÑOS EN LA ILEGALIDAD
Las causas que provocaron el incendio en la planta química. El Ayuntamiento de Chiloeches decidió el pasado 17 de junio clausurar la planta de reciclaje de productos químicos por su "actividad clandestina" y por "no disponer de licencia de apertura o autorización de puesta en funcionamiento para el ejercicio de su actividad", así como por "incumplimiento de normativas medioambientales y de seguridad", extremo que fue publicado en el Boletín Oficial de España (BOE) del 14 de julio de 2016.
Fue el 6 de junio de 2016, "más dos meses después de la primera notificación", cuando el ingeniero municipal informó de que esta empresa "seguía metiendo más material contaminante, tóxico e inflamable", lo que acarreó su clausura.
Además, el Gobierno de Castilla-La Mancha decretó hace poco más de un mes la suspensión temporal de la autorización para gestionar residuos de la empresa cuya nave está ardiendo desde la mañana del viernes en un polígono industrial de Chiloeches.
Fuentes del Gobierno autonómico han confirmado que esta decisión se tomó a raíz de sendas inspecciones realizadas tanto por el servicio regional de Medio Ambiente competente como por unidades del SEPRONA de la Guardia Civil.