10 tips sencillos para una compra sostenible
Según los datos de las Naciones Unidas, se tiran cinco millones de bolsas de un solo uso cada año y se desechan un millón de botellas de plástico cada minuto. ¿Cómo contribuir a disminuir estas cifras?
Esto nos hace pensar en cómo podemos ser sostenibles y como consumidores replantearnos nuestros hábitos diarios y abrazar esta sostenibilidad como guía para repensar la forma en que producimos, consumimos y vivimos en cualquier ámbito de nuestra vida. Por ello te dejamos una lista de diez consejos para una compra sostenible y que no dejes para mañana lo que puedes hacer hoy.
1. Compra a granel siempre que puedas
Comprando productos a granel disminuimos el impacto causado por los envases, siempre y cuando sepamos conservarlos cuidadosamente en nuestra despensa, ya que los periodos de caducidad son más cortos. Para que alargues la vida útil del alimento prueba eligiendo bien la pieza y comprando la cantidad justa que vayas a necesitar.
2. Lleva tu propia bolsa reutilizable
Es muy buena idea llevar siempre contigo una bolsa plegada dentro de tu mochila o bolso, por si necesitas comprar algo de imprevisto. De lo contrario, si vas a realizar una compra más grande, puedes hacerte con bolsas reutilizables de tela o rafia, una cesta o incluso un carrito de la compra.
3. Busca envases sostenibles
En lo primero que debemos pensar es en disminuir toda la cantidad de residuos posibles. Para lograrlo deberás evitar la compra de productos de un solo uso como toallitas, cubiertos de plástico o maquinillas de afeitar. Además, escogeremos con preferencia los envases con menor cantidad de plástico o que sean fabricados a base de materiales reciclables, como el cartón, el cristal o el plástico compostable. De esta manera estarás realizando una compra responsable y consciente con el medio ambiente.
4. Reutiliza tus envases
Seguro que en tu cocina o despensa tienes envases de cristal o plástico. ¡No los tires! Estos, bien limpios, pueden ser reutilizados para guardar otros alimentos como mermeladas, especias, pasta y legumbres. Asimismo, te pueden servir como elemento decorativo introduciendo luces de colores o bien una planta de interior artificial o natural que tengas en tu casa.
5. Consume productos locales o de cercanía
Comprar productos locales se ha convertido en una de las precauciones adoptadas para disminuir el impacto ambiental, económico y social de nuestro entorno. En la medida de tu posibilidades, puedes comprar y consumir productos de temporada de la zona en la que vivas.
6. Prepara un menú semanal
Preparar un menú semanalmente te ofrece una visión global de todo lo que comes, los nutrientes que adquieres y los que necesitas incorporar para una dieta más equilibrada. Además, puedes hacer con antelación tu lista de la compra y así saber dónde obtener cada producto en su mejor versión, ahorrar y comprar de una forma más eficaz y sostenible.
7. Clasifica los productos de tu lista de la compra
Si lo que queremos es optimizar nuestro tiempo en el supermercado y que los alimentos congelados no rompan la cadena de frío, podemos clasificar la lista de la compra en estas tres secciones principales: nevera, congelador o despensa. Otro consejo es que aunque a la compra llevemos embalaje para productos congelados, estos los podemos dejar para el final, ya que puede que la temperatura ambiente no les favorezca, sobre todo si nos encontramos en verano y se dan olas de calor.
8. Presta atención a las fechas
Algunas veces pensamos que debemos tirar los alimentos cuando exceden un plazo determinado. Sin embargo, lo cierto es que los productos vienen acompañados de dos fechas principales, la de consumo preferente y la de caducidad y solo debemos desecharlos cuando estos han sobrepasado esta última. Así, tendrás una dieta saludable.
9. Evita el desperdicio de comida
Cuando cocines y no te comas todo lo que hayas preparado, la mejor opción es que lo congeles o te lo comas en la siguiente comida. Por otro lado, puedes hacer compost, así estarás devolviendo al suelo nutrientes que nos ha dado en forma de verdura o fruta y reducirás tu propia huella de carbono. Igualmente, existen aplicaciones en las que puedes donar tus alimentos a establecimientos locales que suelen compartir o vender a un precio mucho más bajo estas donaciones. Seguro que alguna persona podrá preparar algún rico plato casero con estos productos.
10. Compara diferentes precios
Comparar y elegir el producto que responda a la mejor relación sostenibilidad/calidad/precio es una de las acciones más importantes a la hora de realizar una buena compra. En ella apostamos por un comercio justo cuando adquirimos alimentos de otras latitudes, como el café, el té o el cacao o cualquier otra bebida de plena tendencia, favoreciendo el desarrollo económico y social de los países productores.
[Esta noticia fue publicada originalmente en El Mundo. Lee el original aquí]