ASEBIO presenta una iniciativa que permite reconvertir residuos agrícolas en productos útiles

La Asociación Española de Bioempresas (ASEBIO) organizó el miércoles el evento de demostración “Zero-Waste Biorefineries” con una visita a la biorrefinería piloto de I+D+i de CLAMBER en Puertollano (Ciudad Real). Esta visita forma parte del proyecto europeo en el que participamos, ValorPlus (VALORISING BIOREFINERY BY PRODUCTS), a partir del cual se busca generar biorrefinerías “integradas” sostenibles y económicamente viables, que hagan un uso completo de la biomasa, minimizando la producción de residuos y generando el máximo valor posible a partir de los recursos disponibles.
“Esta visita es una estupenda oportunidad para descubrir cómo funcionan los procesos dentro de la economía circular. Este nuevo concepto de biorrefinería en el que se enmarca el proyecto supone un avance definitivo al eliminar los problemas asociados a la generación de residuos, dándoles un valor a su vez. Así, se consigue un aumento significativo de su rentabilidad y competitividad frente a sus equivalentes petroquímicos, gracias no solo a la mejora de la eficiencia del proceso por tratar un multiproducto, sino además por dar un nuevo valor a algo que en un principio parecía carecer de ello. Debemos dotar de mayor importancia a los bioproductos y bioprocesos para crear una percepción positiva y facilitar su acceso al mercado”, explicó el Delegado de la Comisión de Biotecnología Industrial de ASEBIO, Javier Velasco.
ASEBIO es, dentro de este consorcio europeo, la entidad encargada de la difusión y diseminación de resultados de ValorPlus, cuyos resultados podrían escalarse en la biorrefinería de CLAMBER.
El proyecto Valor Plus se compone de cinco áreas clave:
- Pre-tratamiento y fraccionamiento: desarrollo de una nueva metodología para la descomposición controlada, liberación y fraccionamiento de la biomasa lignocelulósica.
- Valorización de hemicelulosa: comprende la ingeniería de nuevas enzimas y microorganismos para la hidrólisis controlada y la transformación de la hemicelulosa en oligómeros de alto valor y productos generados del proceso de fermentación.
- Valorización de lignina: uso de procesos combinados quimio-enzimáticos y quimio-microbianos para la despolimerización controlada y transformación de materias primas de lignina a productos de alto valor añadido.
- Valorización de glicerol: comprende ingeniería de nuevos microorganismos seleccionados para la fermentación de glicerol crudo a distintas variedades de productos de valor.
- Demostración del potencial tecnológico y económico de la integración y escalado dentro de las cadenas de valor de biorrefinería existentes y futuras.
ValorPlus ayuda a mejorar la eficiencia económica y medioambiental del comportamiento de las biorrefinerías existentes en Europa; a crear impactos beneficiosos desde el punto de vista económico de bioproductos para reducir pérdidas y generar productos y servicios de alto valor añadido y mejorar el conocimiento del uso de residuos naturales.
El principal producto que se obtendrá en la valorización de la lignina son los bioplásticos tales como el PHA (polyhydroxyalkanoates). En la valorización del glicerol, mediante la purificación y fermentación con bacterias lácticas del glicerol crudo, se ha obtenido productos como el ácido láctico, usado en la producción de PLA en la industria del plástico y como aditivo alimentario. En el proceso de recuperación de hemicelulosa, se obtienen a través de procesos de fermentación de los monosacáridos obtenidos butanol, proteínas de células individuales para la alimentación y xilitol (un sustituto de azúcar bajo en calorías), así como prebióticos a partir de los oligosacáridos obtenidos y purificados durante el proceso.
¿Qué productos pueden obtenerse a través de biomasa en CLAMBER?
- Polihidroxialcanoatos (PHAs), que son precursores de los bioplásticos para la agricultura, para las bolsas, para los botes, etc.
- Ácido cítrico. Actualmente se utiliza como aditivo alimentario (acidulante, conservante, antioxidante) y detergente y puede utilizarse como compuesto de partida para llegar a otros compuestos más complejos
- Ácido succínico. Igual que el anterior se utiliza como compuesto de partida para la fabricación de una amplísima variedad de productos: poliuretanos (compuestos que se utilizan en la fabricación de espumas de poliuretano, que se utiliza en la construcción de coches, paneles de construcción), aditivos para pinturas y recubrimientos, adhesivos, sellantes, pieles artificiales, aditivos alimentarios, cosméticos y productos de higiene personal, plásticos biodegradables, nylon, lubricantes industriales, plastificantes libres de ftalatos, compuestos farmacéuticos, etc.
Más sobre el proyecto CLAMBER
El proyecto CLAMBER, en cuyos inicios y creación participó ASEBIO, da un valor diferencial respecto a cualquier otro proyecto promovido actualmente en Europa, no sólo por su capacidad de producción de gran variedad de materias primas, sino también debido a la proximidad de un clúster petroquímico como el de Puertollano, que capacita a las industrias auxiliares de la zona, y facilita todos los aspectos de logística abaratando los costes de transporte y suministro.
La Biorrefinería de I+D CLAMBER es una instalación pública, perteneciente al Instituto Regional De Investigación y Desarrollo Agroalimentario y Forestal de CLM (IRIAF), a escala demostrativa que está al servicio de las empresas para hacer pruebas de escalado, optimización de bioprocesos, desarrollo de nuevos bioproductos, estudios de viabilidad técnica y económica, formación, etc. en materia de valorización material de la biomasa. Supone un alto valor añadido debido a que permite un monitorización, análisis y validación de todo el proceso de escalado desde laboratorio hasta la etapa semi-industrial, permitiendo la identificación de defectos, barreras y oportunidades de nuestro proceso, permitiendo incluir, probar y refinar los cambios necesario en nuestro proceso, reduciendo los plazos de entrega y los costes de inversión, y validándolo así para su desarrollo industrial. Al tener un tamaño casi industrial, pues puede tratar casi 2 toneladas al día de biomasa lignocelulósica y además dispone de un tren de fermentación que va desde 3 litros hasta 20.000, los resultados obtenidos son mucho más representativos y fiables.
En Europa existen pocos centros de referencia para la demostración y desarrollo de bioprocesos. Algunos ejemplos relevantes como: la planta piloto de Europa Bio Base Europe en Gante (Bélgica) que ofrece la capacidad de utilizar la investigación, conocimiento e infraestructuras y equipamiento para la validación de procesos y productos; el Instituto Nacional de bioprocesamiento de Investigaciones y Capacitación (NIBRT) en Irlanda, un centro de excelencia para la formación e investigación en el procesamiento biológico generado con el propósito de replicar una planta de bioprocesamiento moderno; y el Centro de Innovación de Procesos de Reino Unido (CPI), un centro de innovación tecnológica para permitir el desarrollo, demostración y escalado de productos y procesos, los cuales han conseguido posicionarse como puntos de referencia en el mapa de la innovación. Estos centros han surgido fruto de la colaboración entre las universidades, gobiernos y agencias de inversión privada.
Adhesión a la Estrategia Española de Economía Circular
En septiembre de este año, los Ministerios de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y el de Economía, Industria y Competitividad presentaron la Estrategia Española de Economía Circular a través de la cual los distintos agentes que participan se comprometerán a impulsar la transición hacia una economía circular, un pacto al que acaba de adherirse ASEBIO.
Además, ASEBIO participa en el Observatorio Español de la Bioeconomía, que desarrollará los planes anuales de actuación que crearán la Estrategia Española de Bioeconomía