El Plan de inspección 2017-2020 establece la necesidad de que se lleve a cabo de manera flexible a los cambios y con capacidad de adaptación a los recursos disponibles y a la experiencia adquirida en su implantación. 

Así, el programa de inspección, publicado en el DOCM del 14 de mayo, concreta el régimen de las inspecciones, las prioridades, las inspecciones previstas y los controles a realizar, así como los dispositivos concretos de cooperación entre las autoridades que participen en las inspecciones y los recursos humanos, financieros o de otro tipo que se asignarán al desarrollo del programa anual.

El programa de inspección para este año se basa en inspecciones sistemáticas o prefijadas en operadores que importen o exporten residuos desde o hacia los estados miembros de la Unión Europea, así como traslados en tránsito por la comunidad autónoma, e inspecciones no prefijadas en operadores y en tránsito derivadas de quejas, denuncias, incidentes o accidentes e investigaciones de delitos.

En Castilla-La Mancha hay establecidos 19 operadores repartidos en las cinco provincias entre establecimientos, empresas, transportistas, agentes y negociantes que se dedican a la exportación o importación de residuos desde o hacia la UE con destino a su eliminación o valorización. La finalidad del programa de inspección es incrementar el grado de cumplimiento de la normativa en materia de residuos, hacer un diagnóstico de ese cumplimiento y definir y aplicar estrategias de intervención por parte de la Viceconsejería de Medio Ambiente.

De acuerdo con la evaluación de riesgos, la Administración hará una selección de instalaciones a inspeccionar y establecerá cuándo se llevará a cabo la inspección, y también realizará inspecciones en el transporte para el traslado transfronterizo de residuos, que en Castilla-La Mancha se lleva a cabo por carretera y, ocasionalmente, por ferrocarril. En cuanto a la coordinación con otras autoridades, se establece que la colaboración con el ministerio competente está asegurada a través de la red Redia de inspección ambiental, y también participan el cuerpo de agentes medioambientales, la Policía Local y el Seprona. Con respecto al personal, durante el año 2018 serán funcionarios de la Viceconsejería de Medio Ambiente y de las direcciones provinciales los que se dediquen al programa de inspección.