El vertedero de Brasilia es uno de los mayores vertederos de América Latina y este año comienza su progresivo cierre. El llamado vertedero Estructural es uno de los 50 más grandes del mundo, en el que se recogen los residuos de 5 millones de personas. El cierre del vertedero es el primer caso de éxito importante en la campaña de la Asociación Internacional de Residuos Sólidos (ISWA) #closedumpsites.

 

La ciudad nunca ha tenido ningún servicio de reciclaje o de tratamiento de residuos de cualquier tipo desde la fundación de la ciudad hace casi 60 años. Sin embargo, las cosas están a punto de cambiar. La semana pasada la ciudad abrió su primer relleno sanitario y comenzó el proceso de cerrar el vertedero. Además la ciudad está construyendo una serie de plantas de clasificación y recilaje, y hasta que estas instalaciones estén terminadas, el vertedero estará parcialmente abierto.

Presidente de ISWA Antonis Mavropoulos fue invitado a Brasil para supervisar el cierre de esta instalación. ISWA  continuará monitoreando el proceso en los próximos años y asegurar que la ciudad mantiene su compromiso con el tratamiento de los residuos de una manera sostenible.

En el Congreso Anual de la ISWA del 2016, se creó una hoja de ruta para el cierre de los mayores vertederos del mundo. En estos vertederos se acumula el 40% de los residuos mundiales, generados por 4.000 millones de personas. Estos vertederos suponen un gran problema medioambiental y de salud pública.

La tarea va a ser difícil puesto que casi la totalidad de estos vertederos se sitúan en países en vías de desarrollo, con una laxa o inexistente legislación en materia de recursos y reciclaje.