Copenhague tendrá una incineradora con estación de esquí
En lo que constituye otra vuelta de tuerca más a la aplicación de arquitectura vanguardista en el diseño de instalaciones de gestión de residuos, el arquitecto danés Bjarke Ingels (BIG) ha diseñado esta innovadora propuesta en la que reinterpreta una planta incineradora de residuos en cuya fachada construirá una pista de esquí urbana.
Situada en una zona industrial cerca del centro de la ciudad la nueva planta de obtención de energía a partir de residuos será un modelo ejemplar en el ámbito de la gestión de residuos y la producción de energía, así como un hito arquitectónico en el paisaje urbano de Copenhague. El proyecto sustituye a la vieja planta de Amagerforbraending construida hace 40 años, e integrará las últimas tecnologías en el tratamiento de residuos y la conservación ambiental. El proyecto de Bjarke Ingels fue el seleccionado tras una competición internacional que recibió 36 propuestas.
"La propuesta de BIG contribuye a la ciudad con algo útil y bello. Con este edificio se crean oportunidades de mostrar al mundo las capacidades de Dinamarca en temas ambientales y energéticos" dijo Röttger Ulla, Director de Amagerforbraending.
En lugar de considerar la Amagerforbraending nuevo como un objeto arquitectónico aislado, el edificio se concibe como una oportunidad para crear un destino en sí mismo. El techo de la nueva Amagerforbraending se convierte en una cuesta de 31.000 m2 con pistas de diferentes niveles de habilidad para los ciudadanos de Copenhague, sus municipios vecinos y visitantes.
"La planta de incineración de residuos es un nuevo ejemplo de lo que en BIG llamamos sostenibilidad hedonista, la idea de que la sostenibilidad no es una carga, sino que una ciudad sostenible, de hecho, puede mejorar nuestra calidad de vida. La planta energética con una pista de esquí es el mejor ejemplo de una ciudad que es a la vez ecológica, económica y socialmente sostenible", afirmó Bjarke Ingels.
El acceso a las pistas es a través de un elevador que asciende a lo largo de la chimenea de la planta, ofreciendo detalles de su funcionamiento interno y vistas privilegiadas de la capital danesa. La chimenea ha sido modificada para que libere anillos de humo cada vez que almacene una tonelada de CO2. Por la noche, los anillos de humo se iluminarán con diferentes colores.
Desde la distancia, todo el edificio está envuelto en una fachada verde vertical formada por ladrillos apilados, convirtiéndola en una montaña a lo lejos. En el área circundante se creará un parque que ofrecerá actividades deportivas tanto en verano como en invierno. Un sistema de rutas conectará la totalidad del parque con la zona residencial.
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Vía Abitare
Copenhague, Dinamarca