El ayuntamiento de A Coruña cargará los costes de basura a las empresas que más contaminen
El alcalde, Xulio Ferreiro, anunció ayer que la política de la Concejalía de Medio Ambiente en tratamiento de residuos seguirá el lema de “el que contamina, paga”. El primer edil hizo estas declaraciones en unas jornadas en Barcelona, a donde acudió acompañado de la edil del área, María García. Allí recordó que la gestión de basuras es cada vez más cara, tanto porque cada vez hay que procesar una mayor cantidad, como porque cada vez el reciclaje tiene un nivel más exigente. Así que el coste se trasladará a los que más contaminen. “Estas políticas se centrarán en los grandes produtores”, declaró.
Según el Ayuntamiento, estos “grandes productores” generan el 30% de los residuos de la ciudad. “Una correcta separación y recogida en este sector tendría una incidencia directa en la percepción de limpieza y ocupación del espacio público”, opinó Ferreiro. El Gobierno local piensa poner en práctica sus ideas aprovechando que el año que viene finaliza el contrato vigente de recogida de basuras, que mantiene con la empresa Cespa.
Actualmente, la gestión de residuos municipal, incluyendo la recogida, su tratamiento y su almacenaje, se lleva casi la mitad del presupuesto de Medio Ambiente. A esto hay que añadirle la limpieza viaria. En total, tres cuartas partes del presupuesto, como ocurre en casi todos los municipios.
La recaudación vía tasas cubre gran parte de estos gastos, pero no todo, lo que deja menos dinero para saneamiento, mantenimiento de parques, cementerios, sanidad, control de plagas y bienestar animal, competencias todas de la Concejalía de Medio Ambiente. El importe de los contratos crece y, consecuentemente, mengua el margen de maniobra del Ayuntamiento para diseñar políticas ambientales.
Pago
Para distribuir los costes de forma más equitativa, Medio Ambiente piensa establecer una tasa progresiva. “Hay que cubrir los costes y distribuirlos en función tanto de la renta como del esfuerzo en colaboración, es decir, que quien menos residuos produce y mejor los separa, menos paga”, describió Ferreiro.
Otro punto que destacó en su intervención es el descenso en el pago por tonelada de residuos recogida y tratada que aporta Ecoembes: “Las empresas pagan a Ecoembes por poner envases en el mercado. Estas tasas deberían permitir y promover sistemas de devolución y depósito de envases de bebidas, sistemas que non son abarcables”.