El Consorcio de Residuos Ribera-Valldigna rebaja la tasa a consecuencia de un incremento del reciclaje

El Consorcio de Residuos Ribera-Valldigna podrá finalmente bajar la tasa que pasa al cobro por el tratamiento y eliminación de la basura el próximo año. La entidad ha aprobado provisionalmente una modificación de la ordenanza fiscal de este servicio que reduce en cinco euros la tasa media que pagarán los usuarios, que baja hasta los 60,54 euros. Una reducción de las toneladas de residuos tratadas en planta como consecuencia de un aumento del reciclaje se presume como una de las causas de la reducción de la tasa, que se produce además después del brusco repunte aplicado el año pasado tras un proceso de depuración del padrón que generó un déficit que se tuvo que repercutir entre los residentes en los 51 municipios que conforman el ente. Tampoco el año anterior se había conseguido el objetivo al dispararse los costes de traslado del rechazo al carecer en la comarca de un vertedero. El presupuesto de 2019 estima este coste en 2,5 millones de euros.
Con todo, la evolución de la tasa, que en cada municipio depende de la basura que genera, no es uniforme. El coste del servicio subirá en seis pueblos mientras se reduce en 45. Destaca como casos más extremos el aumento en 13,79 euros en Senyera y el descenso de 20,5 en Gavarda. Los vecinos de Beneixida seguirán pagando la tasa más elevada (89,90 euros) y los de Benicull la más barata (43,69 euros). Fuentes del consorcio, no obstante, subrayaron que los importes que recoge la ordenanza son provisionales ya que se han calculado en base a las unidades fiscales (viviendas o comercios) del año 2018, por lo que pueden producirse pequeñas variaciones.
El presidente del consorcio, Salvador Montañana, recordó ayer que la reducción de la tasa era una promesa que el año pasado no se pudo cumplir al tener que hacer frente al déficit provocado por la depuración del padrón y que en este nuevo ejercicio podría haber sido incluso superior. No obstante, indicó, se han contemplado diferentes inversiones para mejorar el servicio como la ampliación de los ecoparques de Alzira y Catadau, la construcción de uno nuevo en la misma planta de tratamiento que ayudará a completar la visitas con fines educativos o la adquisición de un tercer ecoparque móvil de forma que aquellos municipios que no disponen de un fijo podrán tener el servicio todas las semanas. Montañana también señaló que se ha contempla la informatización de todos los ecoparques con el objetivo último de tratar de premiar a aquellos que más reciclan y, por otra parte, se contempla un nuevo servicio de recogida de restos de poda tanto en zonas de segunda residencia como para los servicios de jardinería de los ayuntamientos, una materia prima que permitirá mejorar la calidad del compost que se produce.
Montañana destacó que esta tasa media de 60 euros mantiene al Consorcio Ribera-Valldigna como el más barato de la Comunitat Valenciana. Este importe representa prácticamente el 50% de la tasa que cobran otros consorcios de la provincia de València.