El mayor uso de productos farmacéuticos incrementó las emisiones durante la pandemia
El aumento del uso de productos farmacéuticos aumentó las emisiones de carbono durante la pandemia de Covid-19, a pesar de los esfuerzos para reducir la huella de carbono, según un estudio de la Universidad de Nagoya (Japón).
Para evaluar los cambios a lo largo del tiempo en la huella de carbono, el grupo de investigación registró la electricidad, el gas, el consumo de agua, los costes farmacéuticos y de suministros médicos y las cantidades de residuos del Hospital Universitario de Nagoya y de la Facultad de Medicina de la Universidad de Nagoya entre 2010 y 2021. Según las conclusiones del estudio, publicado en la revista 'Globalization and Health', las emisiones de carbono procedentes del gas y la electricidad disminuyeron durante la pandemia de Covid-19, pero aumentaron las relacionadas con el uso de productos farmacéuticos.
Así las cosas, el equipo de investigación de Nagoya descubrió que la huella de carbono global en 2020 había aumentado casi un 27 por ciento en 10 años. Aproximadamente una cuarta parte de estas emisiones de carbono procedían del consumo de electricidad. A pesar del aumento general de la huella de carbono del hospital durante el estudio, esta disminuyó ligeramente, algo más de un 2 por ciento, en el primer año de la pandemia de Covid-19. Esto se debió en parte a que las emisiones de carbono fueron inferiores a las del año anterior. La causa fue un menor número de pacientes en 2020 y las consiguientes reducciones en productos farmacéuticos, uso de agua y residuos no médicos.
Sin embargo, a pesar de la disminución de la huella de carbono global del hospital, la gravedad de la Covid-19 siguió contribuyendo a las emisiones de carbono. Durante la pandemia, la estancia media de un paciente en el hospital fue más larga debido a la necesidad de una mayor atención médica. Además, el mayor número de pacientes que requirieron cuidados intensivos supuso un aumento de las emisiones de carbono procedentes de los productos farmacéuticos.
"Hay dos lecciones importantes de esta investigación. En primer lugar, urge evaluar la realidad de las emisiones de carbono médicas porque el personal médico no puede sacrificar a las generaciones futuras con la excusa de salvar a los pacientes actuales", afirma uno de los investigadores. "En segundo lugar, es importante promover medidas de salud pública para reducir la futura demanda médica, porque el mundo se enfrenta a una sociedad envejecida, al sobretratamiento, el sobrediagnóstico y las visitas innecesarias. Es crucial reconocer la importancia de la vacunación y la medicina preventiva desde una perspectiva sostenible. Esta investigación muestra tanto la importancia como la realidad de medir y evaluar con precisión las emisiones de carbono en los centros médicos de todo el mundo", ha finalizado.
[Esta noticia ha sido publicado originalmente en Infosalus. Lee el original aquí]