Europa fija posición respecto al traslado internacional de residuos, que supone el 16% del comercio global
El Parlamento Europeo fijó el pasado 17 de enero su posición ante las negociaciones con los Estados miembros del proyecto de ley sobre procedimientos y medidas de control en el traslado de residuos, y solicita normas más rigurosas para proteger el medioambiente y la salud humana.
El texto aprobado por la Eurocámara, que servirá de base en las negociaciones con el Consejo sobre la forma definitiva de la legislación, salió adelante con 594 votos a favor, 5 en contra y 43 abstenciones. En él se espalda la prohibición explícita del traslado de residuos que no pueden ser recuperados dentro de la Unión Europea (UE), excepto bajo autorización en algunos casos justificados. La rigidez de esta postura ya ha sido criticada por recicladores europeos, agrupados en la organización EuRIC.
El Parlamento Europeo también acordó que se prohíba la exportación de residuos peligrosos a países que no pertenezcan a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). De esta manera, el envío de residuos no peligrosos para su recuperación se permitirá a países de fuera de la OCDE que lo autoricen y que demuestren tener la capacidad de tratarlos de manera "ambientalmente correcta".
Además, los eurodiputados proponen prohibir la exportación fuera de la OCDE de residuos plásticos y reducirla gradualmente dentro de la OCDE hasta su prohibición en un plazo de cuatro años. El Parlamento también plantea la creación de un mecanismo común basado en el riesgo que facilite a los Estados miembros "la prevención y detección de los traslados ilícitos de residuos".
La Comisión Europea presentó su propuesta legislativa en noviembre de 2021 en la que establecía procedimientos y medidas de control para el traslado de residuos en función de su origen, destino y ruta de transporte, el tipo de desecho y el tipo de tratamiento aplicado en el destino. Esta modificación legislativa pretende aumentar la protección de la salud humana y el medioambiente, al tiempo que se aprovecha el potencial de los residuos para avanzar hacia los objetivos de la UE para una economía circular y no contaminante.
En 2020, la UE exportó fuera de su territorio 32,7 millones de toneladas de desechos, lo que representa el 16% del comercio global de residuos. A esa cantidad se suman alrededor de 67 millones de toneladas anuales de desechos que se trasladan entre Estados miembros.
[Este contenido ha sido reelaborado a partir de EFE VERDE. Lee el original aquí]