La Junta de Extremadura, en contacto con el Gobierno, ha elaborado un borrador del Plan Integrado de Residuos de Extremadura (Pirex). Se lo presentó la pasada semana a los alcaldes, a través de la Fempex, y también con la información de la empresa pública Gespesa. Ese plan estaría aprobado por el Consejo de Gobierno de la Junta tras el verano y entraría en vigor a finales de año.

Habrá dinero de Bruselas para modernizar los siete ecoparques existentes en Extremadura para aumentar lo que se recicla y también para las entidades locales. Lo que sí está confirmado es que el Pirex obliga a lograr la reducción en peso de los residuos producidos en 2020 en, como mínimo, un 10% respecto a los que hubo en 2010. También se estipula que los residuos municipales de reutilización y reciclado deberán alcanzar como mínimo el 50% en peso en cuatro años. Además, la cantidad de residuos no peligrosos de construcción y demolición destinados a la preparación para la reutilización y el reciclado, deberá alcanzar como mínimo el 70% en peso de los producidos.

El director general de Medio Ambiente, Pedro Muñoz, admitió que el Pirex implicará mayor esfuerzo a las entidades locales en la prevención, recogida selectiva y gestión de los residuos pero valoró los empleos que acarrea. Si en España se aplicara toda la normativa, se crearían 52.000 trabajos, incidió Muñoz.

Los extremeños "tiran a la basura" once millones de euros anuales por no reciclar bien, expresó el gerente de Gespesa, José María Carrasco. "Gestionar bien los residuos no solo no cuesta dinero sino que lo genera", agregó.