El Consorcio de Residuos y Energía de Menorca y Ecovidrio, entidad sin ánimo de lucro encargada de la gestión del reciclado de residuos de envases de vidrio en España, facilitarán a los establecimientos del canal HORECA (hoteles, restaurantes y cafeterías) la separación del vidrio mediante un sistema de recogida "puerta a puerta" que se implantará en el centro histórico de Ciutadella.

El conseller de Medio Ambiente y Reserva de Biosfera y presidente del Consorcio, Javier Ares, ha presentado la iniciativa este jueves en Ciutadella, junto con representantes del consistorio, de la entidad Ecovidrio, Ciudadela Antigua, PYME-Menorca y CAEB.

Este servicio gratuito se dirige al colectivo que mayor cantidad de envases de vidrio utilizado, con el objetivo de incrementar la cantidad de vidrio que se recicla en Ciutadella. En este sentido, el año 2015 cada habitante de Ciutadella recicló 25,07 kg, dato que, a pesar de ser superior a la media estatal, es inferior a la media insular situada en 26,64 Kg / habitante * año.

A esta iniciativa de reciclaje, se han adherido un 79% de los establecimientos encuestados. En total se repartirán 92 contenedores de 120L que se sacarán cada mañana para que se les recoja, cinco días por semana durante los meses de junio, julio y agosto y tres días por semana en los meses de septiembre y octubre.

La recogida se realizará con un vehículo de carga posterior de la empresa Contratas y Proyectos Medioambientales Menorca, S.L. identificado expresamente para la recogida diferenciada de vidrio, que transportará el material hasta dos contenedores de mayores dimensiones situados en el centro de recogida de Ciutadella.

Se prevé que con esta actuación se incremente la recogida selectiva de vidrio en un 30%, lo que representa un aumento de 1.963 Kg / semana más.

El coste total de la campaña será de unos 23.000 euros, y será financiada en parte gracias a las aportaciones económicas de Ecovidrio hacia el Consorcio, que en el caso de aplicar un sistema de recogida puerta a puerta el precio por tonelada se llega a triplicar.

En conclusión, se trata de una prueba piloto perfectamente exportable a otros puntos del resto de municipios de Menorca donde haya una gran afluencia de establecimientos de restauración y hostelería.