Científicos de la Universidad Nacional de Seúl descubrieron la forma de reciclar millones de colillas de cigarro para crear un electrodo de carbón híbrido capaz de almacenar el doble de energía que los de carbón convencional.

Uno de los más grandes problemas del tabaquismo, además de los de salud, son los ambientales. Una vez que se consume el tabaco, con suerte, la colilla cae en un cenicero y luego en un contenedor de basura. De no ser así, se acumulan en las macetas, o en las calles.

Afortunadamente, se investigan alternativas para reutilizar las cosas que se desechan. Un grupo de Investigadores de la Universidad Nacional de Seúl en Corea del Sur, investigaron cómo transformar miles de filtros de cigarro en un material que puede mejora el almacenamiento de energía.

Las colillas de Marlboro Gold light, The One Orange y Bohem Cigar Mojito se sometieron a un proceso de alta temperatura llamado pirólisis formando un compuesto híbrido de carbono. Al ponerlo en un electrodo, descubrieron que podía almacenar el doble de energía que el carbón comercial.

Ahora los científicos estudian las posibles aplicaciones que este material puede tener para crear capacitores que retengan energía en dispositivos portables, en turbinas de viento y vehículos eléctricos.

Uno de los autores del estudio señala que muchos países tienen diferentes regulaciones para evitar los millones de colillas que se acumulan cada año, el método que descubrieron es una manera de lograr un país libre de colillas. Esta es una manera muy eficiente de reutilizar todo eso que simplemente no va a dejar de existir.

Tampoco es una invitación a fumar y producir colillas, sólo es una forma más real de acabar con un problema al que hace años están tratando de poner solución. Lo mejor de este descubrimiento es que se pueden reciclar las colillas de cigarro que impulsa la tecnología verde.