SIGAUS logra reciclar tres millones de litros de aceites usados en 2018 en Extremadura

El sistema encargado en España de la gestión del aceite industrial usado, SIGAUS, ha logrado recuperar tres millones de litros en 2018 en Extremadura, a través de la recogida en más de 2.200 puntos distintos. El resultado de esta circunstancia ha sido más de un millón de litros de nuevos lubricantes retornados al mercado y casi 5.700 toneladas de CO2 ahorradas. Así lo señala en nota de prensa SIGAUS, que destaca que Extremadura dispone de un "buen modelo" de ese "nuevo" paradigma económico que están impulsando las autoridades de Europa y España, y que aboga por minimizar la generación de residuos y reintroducir los que se produzcan en nuevas cadenas productivas. Se trata del caso del aceite industrial usado.
En concreto, en 2018 en Extremadura se han recogido 3.129 toneladas brutas (incluyendo el agua y sedimentos con los que el aceite usado suele presentarse), lo que equivale a 13 toneladas cada día laborable, del año). Asimismo, en Extremadura, 2.211 establecimientos han generado aceites usados en 2018. El 85% de ellos han sido establecimientos que generaron pequeñas cantidades de aceite usado (un máximo de 2.000 kilos al año). Por tipologías, el 62% de puntos generadores han sido talleres de reparación de vehículos. Junto a ellos, se ha recogido residuo en 250 industrias y varios miles más de instalaciones de diverso tipo, desde construcción a agricultura, hostelería u otros servicios. En total, se han realizado 4.617 recogidas (19 recogidas cada día laborable del año), siendo la más frecuente de apenas 174 kilos (aproximadamente un bidón de aceite usado).
En cuanto a la dispersión territorial, ha sido necesario recoger aceite usado en 255 municipios extremeños (que abarcan el 95% de la población), incluyendo 238 municipios ubicados en el medio rural, en los que el sistema de recogida articulado por SIGAUS "contribuye a la protección del entorno en esas zonas de mayor despoblación, prestando un servicio de valor para el tejido económico local".
La "atomizada" generación de aceite usado ha sido tal que se hizo necesaria la recogida de 100 toneladas de este residuo peligroso en 116 establecimientos situados en zonas desfavorecidas de montaña, cuya altitud y/o pendiente conlleva importantes limitaciones a la actividad agraria y, con ella, al mantenimiento de estas poblaciones. Precisamente, es en estos entornos más aislados y despoblados donde existen los "más importantes" valores naturales que deben ser protegidos. En Extremadura existen numerosos espacios naturales protegidos, en los que se ubican 31 establecimientos que el pasado año han generado 30 toneladas de aceites usados, explica SIGAUS, que como ejemplo indica que se han acopiado 27 toneladas de este residuo "peligroso" en la Reserva de la Biosfera Transfronteriza Tajo-Tejo Internacional, recogidos en 28 establecimientos generadores de aceites usados.
El director general de SIGAUS, Eduardo de Lecea, ha señalado que la gestión de los aceites industriales usados en Extremadura es un "buen ejemplo" de proyectos de Economía Circular que "están funcionando ya de forma eficaz y sostenible". "Lo hacemos posible con un residuo complejo, y de costosa gestión, gracias al compromiso de las empresas involucradas, al impulso de la Administración, y a la conciencia ciudadana", afirmó. "Entre todos, debemos seguir avanzando hacia este nuevo modelo de crecimiento, más innovador e inteligente, en el que los residuos que se recogen en las ciudades y en los pueblos de España se convierten en recursos. El camino ya no tiene vuelta atrás", ha concluido.