Una década transformando residuos industriales en materiales de construcción sostenibles
Han transcurrido diez años desde que naciera el Grupo de Investigación de Ingeniería de la Edificación (GIIE) de la UBU, de la mano de la química y actual vicerrectora de Estudiantes Verónica Calderón. Una década en la que no han parado de trabajar, especialmente en dar una segunda oportunidad y poner en valor los residuos industriales para ofrecerles una segunda vida en forma de materiales de construcción reciclados, con el objetivo de conseguir un mayor compromiso con el medio ambiente. Es un equipo humano, sobre todo, "transversal", donde la visión y los conocimientos de cada uno de sus miembros han dado lugar a un grupo sin parangón.
"Hace diez años nos preguntamos qué podíamos hacer con los residuos industriales, ya que suponían un serio problema medioambiental y decidimos trabajar en recuperarlos para crear nuevos materiales de construcción", comenta Sara Gutiérrez, miembro del grupo y profesora del Grado de Arquitectura Técnica.
Estos materiales tienen posibilidades de mejora respecto a los tradicionales y "fuimos concursando a proyectos nacionales primero y, poco a poco, consiguiendo alguna ayuda económica para seguir investigando y avanzando". Todo ese trabajo se ha ido reflejando en las doce patentes que ha desarrollado el grupo, una de ellas, además, en explotación económica por una empresa, ‘Procedimiento de obtención del hormigón bituminoso en caliente con residuo de poliuretano espumado’.
La realidad actual es que el sector de la construcción "ha impactado e impacta negativamente en el medio ambiente, en cuanto a la fabricación", comenta Gutiérrez y es que "para desarrollar muchos materiales se necesitan materias primeras que están acabando de forma progresiva con los recursos naturales". Se debe a que el sector trabaja con materiales 'masivos' y toda la materia prima son materiales naturales que se extraen directamente de canteras". Con el ánimo de evitar este círculo de ‘consumo’, el grupo recicla residuos y crea, fundamentalmente, "materiales compuestos, desarrollados a base de cemento, yeso y cal, como los morteros y hormigones con residuos como la pizarra, la escoria de la industria metalúrgica, el silestone, el vidrio y, especialmente, polímeros, residuos plásticos". Este último, aunque no procede de la construcción, "es un residuo en auge porque la mitad de los productos industriales son plásticos", comenta el miembro del grupo y arquitecto técnico, Carlos Junco.
Algunos de estos materiales, como es el caso de los polímeros, consiguen unos resultados mejorados en su uso en la construcción. "Mejoran tanto el aislamiento térmico como el acústico", explica Gutiérrez. El silestone o las escorias, "se comportan mejor a nivel mecánico"; el vidrio "se equipara a un mortero tradicional, pero obviamente causa menor impacto en el medio ambiente, al igual que la pizarra".
Así las cosas, nuevos materiales como el prefabricado de yeso con poliuretano "han tenido interés por parte de empresas del sector, para su fabricación". Su puesta en marcha se encuentra dentro del proyecto europeo Life- que ya el año pasado aprobaron al grupo pero cuya financiación no llegó- y "este año lo hemos mejorado y contamos con el soporte del fabricante interesado en él". Proyectos como este, que implican financiación y visibilidad, son los que consiguen dar el empuje que necesitan estos nuevos materiales para que "no se queden en investigaciones puramente científicas y teóricas sin uso", explicó Junco. El grupo va un paso más allá y cierran el círculo "con el reciclaje de los materiales que estamos fabricando con esos residuos". Reciclaje del reciclado. "No podemos hablar de material sostenible si no podemos darle una nueva vida".
UN GRUPO MUY PRODUCTIVO
A todo este trabajo, el grupo suma 27 artículos científicos en algunas de las revistas más prestigiosas, 9 proyecto de investigación, la participación en más de una treintena de congresos nacionales e internacionales, así como diversos premios. Precisamente ahora pueden llevarse uno más, el VI Premio de Edificación Sostenible. El grupo burgalés participará en la final el próximo 18 de enero, en la categoría demedio ambiente y lo hará, precisamente, poniendo sobre la mesa el trabajo desarrollado científico del grupo durante estos diez años. El rival a batir será Acciona con un proyecto sobre "al recuperación de suelos ácidos", tal y como explica otro s de sus miembros, Ángel Rodríguez.
Precisamente el grupo ha logrado, además, transmitir la inquietud investigadora a los estudiantes de los diferentes grados de la Escuela Politécnica Superior. "Les volcamos ese amor por la investigación, que vean que nuestra formación van más allá de la construcción".