Varios ayuntamientos catalanes apuestan por "ensanchar la base" del reciclaje

Los ayuntamientos de Serinyà y de la comarca del Pla de l'Estany (Girona), Sant Boi de Llobregat, Granollers e Igualada (Barcelona) han apostado este lunes por "ensanchar la base" de los ciudadanos que reciclan, teniendo en cuenta que los que lo hacen están muy convencidos, pero éstos deberían activar la conciencia de los de su alrededor. En el marco de la Jornada Tecnologías Inteligentes al servicio del ciudadano, promovida por Ecoembes y la Fundación Fòrum Ambiental, el teniente de alcalde y concejal de Obras Públicas y proyectos y Medio Ambiente de Granollers, Albert Camps, ha pedido aumentar la conciencia de los ciudadanos que no reciclan, y todos han coincidido en esta necesidad.
El alcalde de Igualada y presidente de la Diputación de Barcelona, Marc Castells, ha subrayado que "no hay una forma homogénea" que sirva para conseguir este propósito en todas partes, si bien los municipios son el instrumento para conseguirlo. Los citados municipios y comarca experimentarán este año de forma "pionera" en Europa un plan de reciclaje 5.0, que buscará revolucionar a los ciudadanos a la hora de deshacerse de los residuos generados a través de contenedores inteligentes, identificaciones digitales y recompensas como donaciones a ONG, por ejemplo. Así, Castells ha resaltado la importancia de que el ciudadano sea el "protagonista de este relato desde el centro", y que las nuevas tecnologías jueguen un importante papel para hacer un salto destacado a nivel de reciclaje. Para Camps, las nuevas tecnologías "son una realidad y son indispensables", y, vigilando que nunca se conviertan en motivo de exclusión, ha defendido su uso para impulsar proyectos de reciclaje y economía circular.
La alcaldesa de Sant Boi de Llobregat, Lluïsa Moret, ha celebrado la iniciativa “Reciclaje 5.0”, que ha considerado una "iniciativa pionera de compromiso de país" que se ha demostrado históricamente a través de la lucha contra el cambio climático. A su juicio, la sostenibilidad es una perspectiva que seguirá de una forma sistemática en el diseño de las ciudades, que deben ser "más saludables desde un punto de vista integral". Desde Serinyà, que ya ha tenido una experiencia previa sobre este plan impulsado por TheCircularLab de Ecoembes, el alcalde y consejero comarcal de Medio Ambiente, Josep Antoni Ramon, ha visto en el plan numerosas ventajas por propiciar "recompensas" al ciudadano que cumple.
La actual tasa de recogida selectiva en Catalunya es del 40%, según cifras recogidas durante el año 2017 y presentadas por el director de la Agència de Residus de Catalunya, dependiente de la Generalitat, Josep Maria Tost, en julio del año pasado. En la citada rueda de prensa, Tost se mostró convencido de que la tasa de reciclaje se ha acercado a su techo después de 20 años de campañas institucionales en Catalunya y puso encima de la mesa la necesidad de compensar económicamente a quienes reciclen, algo que deberá hacerse de la mano de los ayuntamientos, a los que pedía "voluntad política. El voluntarismo ambiental ha llegado a su techo, necesitamos una nueva chispa, y tenemos claro que el mecanismo debe ser la tasa justa", evidenciaba Tost, que ponía como ejemplo la experiencia de países como Holanda, Alemania, Bélgica y norte de Italia.
Una directiva europea obligará a los países comunitarios a alcanzar un 50% de recogida selectiva en 2020; un 60%, en 2030, y un 65% en 2035 para evitar sanciones, por lo que Tost ha urgido soluciones consensuadas para implementar iniciativas de recogida puerta a puerta y de utilización de chips para "individualizar" esta recogida.