WWF afirma que el derrame de crudo pone de relieve la fragilidad de la costa onubense
Manchas del vertido registrado hace unos días en la refinería de Cepsa en La Rábida han llegado hasta una playa del Espacio Natural de Doñana en el término municipal de Almonte (Huelva), en una franja de unos 150 o 200 metros. Así lo ha indicado en declaraciones a los periodistas en el Puesto de Mando Avanzado (PMA) montado en la playa del Asperillo el consejero de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, José Fiscal, quien ha precisado que el crudo está llegando desde las cinco de la tarde del viernes “en galletas muy dispersas“.
El responsable de la Oficina de Técnica de WWF en Doñana ha remarcado que “cientos de buques al año transitan por las costas onubenses cargados de mercancías peligrosas, no sólo petróleo, y ello implica peligro para la propia costa así como para las actividades que se desarrollan en ella, como la pesca, el marisqueo o el turismo de playa”. Además, considera que este derrame supone “un toque de atención” para todos aquellos que “hablan de ampliar determinadas actividades industriales en el litoral. Tienen que tener presente que hablamos de un riesgo importante para costa de Huelva y para las actividades económicas que en ella se desarrollan”, ha incidido. Dicho esto, ha calificado de “inaceptable” que habiéndose producido el vertido, “la ciudadanía y algunas administraciones no hayan tenido conocimiento del mismo hasta bastantes horas después de que sucediera”.
Algo que es aún más grave pues “estamos en la era de redes sociales, por lo que ante cualquier tipo de incidente de esta categoría se debería informar inmediatamente a través de las mismas, para que todo el mundo pueda conocer qué ocurre y tomar medidas de protección adecuadas”. Según Carmona, “si eso no está estipulado así en los actuales planes de contingencias, habría que modificar los mismos de manera que la ciudadanía esté informada y que todas las administraciones tengan información de primera mano desde el primer momento”.