Aumenta el ingreso de residuos a España provenientes del sur de Europa
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Esa basura, en algunos casos calificada de peligrosa por los riesgos que conlleva para el medio y la salud, entra ilegalmente en España bajo la apariencia de residuo legal, lo que dificulta mucho su detección, ha explicado a EFEverde el comandante Carlos Astráin de la Unidad Central Operativa de Medio Ambiente (UCOMA) de la Jefatura del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil.
Desde la firma del Convenio de Basilea, en los años 80, la norma que rige en Europa es que cada nación debe gestionar su propia basura minimizando el impacto ambiental y en la salud humana mediante el tratamiento adecuado de cada residuo, lo que tiene un coste.
Minimizar ese coste para maximizar beneficios es precisamente lo que lleva a muchos a recurrir a traficantes, que, a su vez, para ganar dinero mueven los residuos a países en los que el coste de tratamiento es menor, las normas ambientales son más laxas o haciéndolos pasar por artículos valorizables (reciclables o reutilizables).
Durante décadas, esta forma de funcionar ha provocado que África se haya convertido en el basurero de Europa en cuanto a residuos de aparatos eléctricos y electrodomésticos, vehículos y ropa, y Asia en lo que respecta a plásticos y papel.
Vienen a España porque es más barato
"Sin embargo, el flujo que más nos preocupa ahora es lo que está entrando en España" vía organizaciones criminales "tradicionales" de Francia e Italia, principalmente, que se han reconvertido tras ver en el tráfico de residuos un negocio que genera "increíbles beneficios" con riesgo "nulo".
Si hace un año el SEPRONA alertaba de movimientos desde Francia e Italia, este tráfico, no sólo no se ha reducido, sino que ha ido en aumento y se está extendiendo, hasta el punto de que ya han detectado envíos desde países como Bélgica o Alemania, según Astráin, que ha alertado de que nos estamos convirtiendo en el vertedero de Europa.
Este tráfico no sólo no se ha reducido, sino que ha ido en aumento y se está extendiendo
"Vienen a España porque es mucho más barato". Por ejemplo, en Francia, gestionar una tonelada de residuo urbano cuesta unos 250 euros frente a unos 50 euros de España, con lo que el ahorro sería de unos 200 euros por tonelada. "Si un camión tiene 20 toneladas y al día estás mandando entre 10 o 20 camiones, echa cuentas", ha apuntado.
Según el experto, España está cogiendo el relevo como destino de residuos a Italia, donde los vertederos ya están llenos y se están viendo obligados a incinerar, lo que implica un coste más elevado (400 euros tonelada) y lleva a recurrir a las mafias para repartir por Europa los residuos, muchos de los cuales están acabando aquí.
Cataluña, Aragón y Comunidad Valenciana, principales destinos
Las comunidades que más "basura" están recibiendo del exterior son Cataluña, Aragón y Comunidad Valenciana debido, básicamente, a que son en las que más gestores de residuos hay implantados junto a País Vasco, en cuya frontera también se han detectado entradas, pero en la que, en principio, no se están quedando los residuos.
Por ahora, lo que llega es, sobre todo, residuo urbano, basura que, en lugar de ser separada y tratada en el país de origen, como debería de ser, se envía directamente a España haciendo creer, entre otras formas, que se trata de un residuo concreto, por ejemplo, papel o plástico, y/o que puede ser valorizado.
Lo que más está llegando ahora es basura mezclada sin ser tratada en los países de origen, así como residuos industriales.
También está entrando residuo industrial, donde el margen de beneficio es mayor, pues al tratarse de sustancias peligrosas, como aceites, disolventes o restos de construcción, el coste de tratamiento es más elevado.
En estos casos, el riesgo para la salud y el medio es también mayor, pues, en el mejor de los casos, acaban en vertederos “normales” en lugar de en plantas de tratamiento adecuadas, y en el peor, enterrados en cualquier lugar, pudiendo contaminar suelos y acuíferos.
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