No obstante, las plantas autorizadas han tratado tan sólo 20.000 aparatos, en el último año, lo que supone un 15% del total producido. Estos datos coinciden con los facilitados por Reciclalia, que indican que entre el 70 y 80 por ciento de estos desechos se pierden y no se gestionan correctamente, según ha señalado el gerente, Carlos Gutiérrez.

Por otro lado, la información facilitado por la Junta de Castilla y León hablan de 7.223 toneladas de RAEES (1.582 toneladas de grandes electrodomésticos, categoría en la que se incluyen los aparatos de frío) recicladas en 2009 en plantas de la comunidad, pero procedentes de Castilla y León, Galicia, Asturias y Cantabria.

De todos modos,la mayor parte de estos desechos acaban en chatarreros y causarán daños a la atmósfera debido a un procesamiento incorrecto de los mismos. Así, se solicita a las Comunidades Autónomas, encargadas de la gestión de los RAEEs y de la concesión de las autorizaciones pertinentes. Son éstas las administraciones que deben velar por el cumplimiento del Real Decreto que entró en vigor en 2005.

Tal y como ha explicado Arana, teniendo en cuenta la tasa que se paga en la compra destinada al reciclaje del aparato, los ciudadanos de Castilla y León pagan al año entre 12 y 15 millones de euros.