El 20 de diciembre del año que acabamos de dejar, se presentó en el Centro Oceanográfico de Murcia el Instituto Español de Oceanografía un ensayo titulado "Mar Menor: una laguna singular y sensible. Evaluación científica de su estado". Entre los numerosos aspectos que desarrolla, el libro trata de los elementos contaminantes hallados en el Mar Menor.

El libro recopila diferentes artículos sobre diversos aspectos dela laguna: ecología, biología, geología e impacto de la geografía humana en el entorno. Estos artículos son fruto de las conferencias que investigadores de la Universidad de Murcia, la Universidad Politécnica de Cartagena, el Instituto Geológico y Minero de España, la Universidad de Alicante y del Instituto Español de Oceanografía hicieron para las Jornadas Científicas del Mar Menor, celebradas en diciembre del 2014.

El libro recalca la necesidad imperante de la conservación del entorno del Mar Menor, tanto por motivos de protección de la riqueza ecológica y medioambiental, como motivaciones de interés y explotación turística.

Según el libro se han hallado numerosos residuos inorgánicos asociados principalmente a la agricultura, el turismo, el desarrollo urbano, la minería, la navegación y el transporte. En concreto, de plaguicidas, hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAHs), fármacos y tensioactivos. Esto significa que anualmente llegan a la laguna, 11 kilos de fármacos y 18 kilos de plaguicidas y PAHs.

La principal vía de entrada de plaguicidas en la laguna son la riadas. Las del 2009 descargaron en el Mar Menor más plaguicidas que la propia rambla de forma regular durante todo un año, y lo mismo ocurrirá con las riadas ocurridas el diciembre pasado. Por ello es necesario la sustitución de los fertilizantes químicos por los fertilizantes orgánicos, la reducción de los plaguicidas y la implantación de un sistema de riego eficiente para que no se filtre la contaminación a los acuíferos.

Para no contaminar los acuíferos se defiende la ampliación de la zona vulnerable de Campo de Cartagena para incorporar el acuífero Triásico de Los Victorias, el sellado del tramo cuaternario de las captaciones profundas y la cementación de pozos abandonados y la declaración del Distrito Minero de la Sierra de Catagena-La Unión como zona vulnerable, con fito-estabilización y tratamiento químico de residuos mineros.