Convenio internacional para adoptar un plan de gestión de basuras del Mediterráneo
Tras tres días de reunión, los países que forman parte del convenio han suscrito un acuerdo denominado "Declaración de París", en el que se apuntan cuatro planes de trabajo a desarrollar en los próximos dos años (hasta el próximo encuentro) y 14 decisiones concretas entorno a ellos. De estas últimas se destaca, entre otras, la adopción de un plan de gestión de las basuras marinas en el Mediterráneo.
Este último punto supondrá que los países de la región, entre ellos España, están obligados a desarrollar programas nacionales de prevención, control y lucha contra los residuos sólidos lanzados al mar, tanto los causados desde tierra (puertos, costa...) como desde los barcos.
La "Declaración de París" apunta que estos programas nacionales deben incidir en la concienciación ciudadana contra las basuras marinas y en el control de los residuos en los puertos.
En un plano global, las cuatro áreas de acción enfatizan "adoptar todas las medidas necesarias para que el Mediterráneo sea un mar limpio, sano y productivo cuya diversidad biológica y ecosistemas estén preservadas"; o "reforzar la gestión integrada de las zonas costeras Mediterráneas".
Proponen también "aportar las preocupaciones por el medio marino Mediterráneo" a la discusión que tendrá lugar en la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro, el próximo junio, así como "instaurar las condiciones para una gobernanza institucional transparente y eficaz del Plan de Acción para el Mediterráneo".
El secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos, que ha representado a España en las negociaciones, ha señalado su satisfacción por "el alto nivel que ha tenido la reunión" y por los acuerdos alcanzados, especialmente por "la gestión integrada de las zonas costeras y el fomento de la cooperación de países no miembros con la estrategia marina de la Unión Europea".
Este último punto supondrá que los países de la región, entre ellos España, están obligados a desarrollar programas nacionales de prevención, control y lucha contra los residuos sólidos lanzados al mar, tanto los causados desde tierra (puertos, costa...) como desde los barcos.
La "Declaración de París" apunta que estos programas nacionales deben incidir en la concienciación ciudadana contra las basuras marinas y en el control de los residuos en los puertos.
En un plano global, las cuatro áreas de acción enfatizan "adoptar todas las medidas necesarias para que el Mediterráneo sea un mar limpio, sano y productivo cuya diversidad biológica y ecosistemas estén preservadas"; o "reforzar la gestión integrada de las zonas costeras Mediterráneas".
Proponen también "aportar las preocupaciones por el medio marino Mediterráneo" a la discusión que tendrá lugar en la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro, el próximo junio, así como "instaurar las condiciones para una gobernanza institucional transparente y eficaz del Plan de Acción para el Mediterráneo".
El secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos, que ha representado a España en las negociaciones, ha señalado su satisfacción por "el alto nivel que ha tenido la reunión" y por los acuerdos alcanzados, especialmente por "la gestión integrada de las zonas costeras y el fomento de la cooperación de países no miembros con la estrategia marina de la Unión Europea".
Vía La información
Foto de Manuel Álvarez (cc)
París, Francia