Diferentes expertos apoyan los beneficios de la recogida puerta a puerta
Julio Barea, responsable de Energía y Cambio Climático de Greenpeace en España, quien apoya el sistema PaP, ha apelado a la responsabilidad de cada habitante, puesto que cada español genera aproximadamente 1,5 kilos de basura al día.
El funcionamiento del PaP incorpora una nueva fracción de materia orgánica a las cuatro ya conocidas: restos, envases, vidrios y papel. La basura es estrictamente inspeccionada y devuelta al ciudadano en caso de no cumplir las exigencias de separación establecidas. Este método se aplica con éxito en diverSos municipios catalanes y otras localidades en el resto de España. No obstante, se ha aprobado también su implantación en varios lugares del País Vasco, con mayor oposición ciudadana.
Las fracciones se recogen diferenciadas según un calendario y horario estipulados, una posible incomodidad para los ciudadanos que provoca rechazo en algunas localidades, aumentando por la "falta de estética e intimidad del sistema".
Víctor Mitjans, Director de la Fundación Retorna, opina que, pese a las incomodidades, el sistema es el más adecuado por su alta tasa de separación. "Al no ser anónima, como la de los contenedores, donde cualquier vecino tira cualquier material, de alguna manera el ciudadano se siente más responsable de participar en la recogida selectiva".
Desde Retorna y Greenpeace no se ve incompatible la aplicación del PaP en grandes ciudades, puesto que no depende de la densidad de población, sino de la fisonomía de las ciudades. Así, consideran que se pueden articular medidas y adaptarse a cada parte de la ciudad. "Madrid o Barcelona tienen zonas aptas", ha afirmado Víctor Mitjans.
Si bien la implantación constituye un alto coste inicial, éste queda compensado con los beneficios ambientales y directos de la recogida, según Mitjans, quien ha añadido que con el mismo coste neto de recogida y tratamiento de residuos, se recuperan más con este método que con los contenedores.
Además, permite aplicar otros sistemas de cobro al ciudadano, pagando por peso, volumen o cantidad de bolsas de basura generadas, por ejemplo la 'Tasa Justa' de Cataluña, con la que paga más quien más residuos genera. La experiencia catalana ha demostrado que el PaP es uno de los métodos que mejor resultado da de recogida selectiva y de reducción de generación de residuos, medidas fundamentales para alcanzar al menos el 50 % de reciclaje exigido a España de cara al 2020 por la Comisión Europea.
Vía Qué!
sabanna (cc)
País Vasco