Diversos estudios muestran el potencial de los empleos verdes en Asturias

Diferentes estudios sectoriales manejados por EQUO-Los Verdes señalan que el ámbito medioambiental es una gran fuente de empleo puesto que, sólo en Asturias, este tipo de actividades en cuatro sectores muy concretos (reciclaje de residuos, movilidad y transporte sostenibles, rehabilitación y mejora energética de edificios y renovables) generarían 10.000 puestos de trabajo (350.000 en toda España). Esto quiere decir que estos cuatro segmentos de actividad supondrían aproximadamente 4.000 empleos más de los que tiene en plantilla en Asturias, de momento, la empresa siderúrgica multinacional más importante del Principado y en torno a 7.000 más que toda la minería asturiana.
Estos datos se apoyan en los Informes de ISTAS, de Greenpeace, Unión de Consumidores de Asturias, Ecologistas en Acción, Asociación para la defensa de la Sanidad Pública, Garrigues, Aeversu (Asociación Profesional de Plantas de valorización de residuos) y en casos concretos como el de la ciudad alemana de Friburgo.
Empleos verdes, según la definición del programa del Programa de las Naciones Unidas para el Medioambiente (PNUMA), son “aquellos que reducen el impacto ambiental de las empresas y los sectores económicos hasta alcanzar niveles sostenibles”. Más concretamente, en la comunidad asturiana la reutilización y reciclaje de las 450.000 toneladas de residuos urbanos que se pretenden quemar en el proyecto de incineradora de COGERSA generarían 2.000 puestos de trabajo, que se sumarían a los 450 que emplea actualmente el mencionado consorcio para el tratamiento de residuos. 2.000 nuevos empleos dignos y sostenibles frente a los 80 que se dedicarían a la quema de residuos.
Además, este tipo de actividades son empleos estables, sujetos a procesos que se mantienen en el tiempo a largo plazo y no expuestos a regulaciones ni deslocalizaciones vinculadas a la reducción del coste salarial, tan habituales y tristemente de actualidad en el Principado.
Aunque no están cuantificados, en Asturias también es muy grande el potencial de creación de empleos sostenibles en otros segmentos de actividad. Asturias sólo se autoabastece de productos hortofrutícolas en un 5%. De hecho, sólo en manzana se necesita un 30% más en la región para la elaboración de sidra. Como dato, la puesta en explotación de 10.000 hectáreas hortofrutícolas generaría unos 20.000 empleos y contribuiría a equlibrar la balanza comercial y acercarnos a la soberanía alimentaria.
El aprovechamiento de la fruta, los residuos de la corta y aserradero para la fabricación de biomasa o la tecnificación del castaño para la construcción crearían empleo estable y sostenible que se quedaría en Asturias, al no estar sujeto a la fuga de capitales.