El desarrollo sostenible, un gran reto para el futuro de los océanos en la era de la economía azul
La novena edición de Transfiere, Foro Europeo para la Ciencia, Tecnología e Innovación, ha albergado en su última jornada un panel temático en torno a las nuevas economías azules de la mano de expertos del sector. Así, Javier Noriega, presidente del Clúster Marítimo Marino Andaluz (CMMA), inició la mesa de debate hablando del modelo de la cuádruple hélice: Academia, administración pública, empresa y personas, como un eje fundamental para el desarrollo y el crecimiento del sector marino-marítimo, “tenemos un reto importante y es necesario profundizar en los mares y en los océanos para un crecimiento sostenible”.
El presidente de la CMMA dio pasó a José Antonio Muñoz que preside el proyecto “La Universidad Europea de los Mares” (SEA-EU), una iniciativa que está coordinada por la UCA (Universidad de Cádiz) e integrada por seis universidades europeas (Francia, Alemania, Croacia, Polonia y Malta) con una importante trayectoria en estudios marino-marítimos. Como así lo reflejó su presidente “nuestra alianza trata de dar respuesta a un reto de la UE liderando el conocimiento de los mares y los océanos en Europa”.
Ignacio Turias, director general de I+D+I del Campus Bahía del Mar, expuso en su intervención la importancia de poner en valor “el capital científico y humano de una forma fácil y de potenciar las relaciones con las empresas”. En referencia al proyecto “La Universidad Europea de los Mares”, explicó que desde la Universidad de Cádiz se “va a intentar que los 180 grupos de investigación colaboren en esta iniciativa para la construcción de nuevas alianzas”.
Rodrigo Beja, director ejecutivo de GreenCoLAB con sede en Portugal, habló de esta plataforma de colaboración entre la investigación y las empresas, cuya agenda de investigación e innovación “se basa en la exploración de microalgas como un componente esencial para las industrias de alimentos, piensos, bioenergía, aguas residuales y cosméticos”. Kendra MacDonald, CEO de Ocean Supercluster de Canadá, explicó cuál era el fin de esta organización liderada por el sector privado con el apoyo del gobierno nacional que agrupa a las empresas para “fomentar la innovación colaborativa, la sostenibilidad y la modernización en los sectores oceánicos del país”.
Rafael González-Quirós, subdirector del Instituto Español de Oceanografía (IEO), contó a los asistentes la labor que realizan en el centro: “Nuestro trabajo está fundamentado en la investigación con un matiz de transferencia hacia las administraciones públicas”. Especificó que “cada vez hay una mayor demanda del estudio del medio marino, por ejemplo, de la ecología marina”. En relación al futuro de los océanos todos confirmaron que la clave está en “el crecimiento sostenible y debe ponerse el foco en la protección del mar”.
El representante de la “Universidad del Mar” señaló que “la economía del mar genera casi la mitad del PIB de Europa”. Desde esta perspectiva “estamos abordando los retos del futuro porque el conocimiento es básico, pero si no se alinea con las necesidades reales, no sirve para nada”. Algunos retos como la creación de ciudades costeras inteligentes, comienza a ser una realidad. “Por eso es necesario abordar la formación con la investigación para que se puedan responder a los nuevos retos”.
Otro de los retos identificados es el transporte de mercancías porque “son los barcos que cruzan nuestros mares y nuestros océanos los que realizan la totalidad del transporte procedentes de las factorías del mundo”, señaló Ignacio Turias. Puntualizó asimismo que otro desafío es “la energía generada a través del mar”. También la representante de Canadá señaló el crecimiento sostenible como fundamental en el futuro de los océanos, “es increíble el impacto ocasionado por el cambio climático en el Ártico “
Rafael González-Quirós apostilló finalmente que “estamos en un momento en que el océano va a ser el centro de la economía mundial. La economía azul va a duplicarse entre 2010-2030 puesto que los seres humanos hemos llegado más tarde a la explotación de los recursos de los océanos “.