Precisamente contra estos hechos se enfoca el Plan Integrado de Residuos de Extremadura (PIREX), con vigencia hasta el año 2015, que cuenta entre sus pretensiones "erradicar el vertido y eliminación incontrolada de residuos, con especial atención a los residuos de construcción y demolición, lodos de depuradora y residuos plásticos de uso agrario". Otros objetivos recogidos son la prevención de la generación y peligrosidad de los residuos, el fomento de la reutilización y recogida selectiva de los residuos con el objetivo de disminuir la cantidad destinada a eliminación, la promoción de la recogida selectiva de biorresiduos para su compostaje y digestión y el incremento de las plantas de reciclaje y la mejora de las existentes, especialmente las dedicadas al tratamiento de residuos de construcción y demolición. Asimismo, también se contempla la mejora de la información sobre residuos y se pretende garantizar la eliminación segura de los residuos y promover la autosuficiencia de instalaciones para este fin, e incentivar la implicación de las Administraciones públicas y entidades privadas en el logro de objetivos ecológicos ambiciosos.

Con respecto a la actual denuncia, el portavoz de Ecologistas Extremadura, Pablo Ramos, solicita más control por parte de las administraciones para evitar la creación de estos vertederos ilegales, que dañan el medio y vierten basura a los ríos. Si bien los residuos urganos suelen estar más vigiladas, Ramos lamenta el problema de los escombros, porque esas zonas también acumulan basuras, ardiendo y produciendo infecciones. En relación a esto, el portavoz señala que "la Junta tiene mucho que decir, porque es la que tiene los medios suficientes para erradicar estas situaciones", muchas más posibilidades que los ayuntamientos.

A este respecto, el día tres de este mes, se publicó en el DOE un decreto aprobado por el Consejo de Gobierno por el que se establece el régimen jurídico de la producción, posesión y gestión de los residuos procedentes de la construcción y de las demolición en Extremadura, buscando garantizar la defensa del medio ambiente y la reducción del impacto paisajístico. De este modo, la norma prohibe "el abandono y vertido incontrolado de los residuos y su depósito en vertederos sin que hayan sido sometidos a la correspondiente operación de tratamiento".

Via El Periódico Extremadura
Foto de Cayetano (cc)
Guadalupe, Extremadura