El Departamento de Medio Ambiente de la Diputación Foral de Gipuzkoa se ha puesto en contacto con las Mancomunidades de Gipuzkoa para recabar "información exhaustiva" sobre las empresas adjudicatarias de la recogida selectiva de textiles en cada mancomunidad y el destino que se da a los mismos, después de que el colectivo ecologista Gurelur acusase a una empresa guipuzcoana de un vertido ilegal de toneladas de ropa usada en la localidad navarra de Ziordia

Asimismo, desde el Departamento se ha requerido que se le haga partícipe de toda la información que dispongan en torno al depósito denunciado. En el Departamento de Medio Ambiente se ha calificado esta actuación como "muy grave" y lamentan este tipo de actuaciones "ya que afectan negativamente a la credibilidad de las instituciones competentes en la materia y a la motivación de la ciudadanía" a la hora de participar en las recogidas selectivas de residuos.

El colectivo ecologista Gurelur denunció  recientemente un "vertido ilegal" en la localidad de Ziordia "de toneladas de la ropa que los guipuzcoanos seleccionan para su reciclaje y reutilización". El vertido, precisó Gurelur en una nota de prensa, incluye ropa de cama, prendas de vestir y de deporte, así como calzado que "proviene de la campaña que se lleva a cabo en la vecina provincia o en todo el País Vasco, que al igual que el resto de las autonomías han apostado por el reciclaje de la ropa que ya no utilizan".

Según añadió el grupo ecologista, se trata de la ropa que los ciudadanos de Gipuzkoa o del conjunto de Euskadi "aportan para su reutilización" y que se "está vertiendo de forma obscena e ilegal por una empresa guipuzcoana, al parecer adjudicataria de este servicio, ya que estos lamentables vertidos se vienen realizando por camiones de esta empresa".

En este sentido aseguran que el Ayuntamiento de Ziordia "se ha encontrado con este desaguisado, por lo que no tiene responsabilidad en el tema", por lo que el Gobierno de Navarra "debe acometer de forma inmediata la retirada de estos residuos y sustanciar las responsabilidades administrativas y legales en las que hayan podido incurrir los responsables de esta agresión ambiental". "Con esta ilegal gestión, la citada empresa está obteniendo unos cuantiosos beneficios, ya que está cobrando como si la ropa que aportan los ciudadanos se estuvieran reutilizando", aseguraba Gurelur, que tacha de "mafiosos" estos comportamientos.

El colectivo agregó que además de las connotaciones legales y de las afecciones ambientales de estos vertidos, en un lugar en el que también se vierten escombros, estas acciones "dan la razón a los ciudadanos que desde hace años dudan que de verdad se estén reciclando los residuos que con tanto esmero separamos los ciudadanos sensibilizados con el medio ambiente".