Entre esta cifra resaltan las más de 61.000 toneladas de escombros que se han recolectado en estas instalaciones, "a pesar del descenso producido en su conjunto en la cantidad de residuos recuperados en los ecoparques, aunque especialmente significativo en el de los escombros ya que el sector de la construcción es uno de los más afectados por la crisis".

Por otra parte, los desechos voluminosos suman más de 22.500 toneladas. Seguidamente se encuentran los restos de poda (15.500 toneladas), 12.500 toneladas de maderas, 3.800 toneladas de papel-cartón, 1.800 toneladas de residuos electrónicos y eléctricos y 1.700 toneladas de plásticos y metales.

Tejedo ha subrayado la relevancia de estas instalaciones en las que los ciudadanos pueden depositar los residuos no aptos para meter en los contenedores. Ls ecoparques son, en general, puntos de recogida y almacenamiento de residuos no orgánicos pero sí urbanos, que son competencia de las entidades locales y que no pueden ser gestionados por los mismos canales que las basuras domésticas.

Los tipos de residuos admitidos en un ecoparque suelen ser: no peligrosos: vidrio, papel, cartón, metales, textiles, sprays y plásticos; voluminosos: colchones, muebles viejos, somiers, cajas, marcos, electrodomésticos, restos de poda y escombros; y peligrosos: aceites, baterías, pilas, tubos fluorescentes, medicinas, radiografías y pequeños envases.