La Unión Europea refuerza su liderazgo climático en la COP30 con compromisos ambiciosos de descarbonización y transición energética
En el marco de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP30), que se celebró en Belém, Brasil, del 10 al 21 de noviembre de 2025, la Unión Europea (UE) reafirmó su compromiso con la acción climática global y la transición hacia sistemas energéticos limpios, justos y resilientes. La estrategia europea buscó garantizar energía asequible, impulsar la competitividad industrial, generar oportunidades económicas y asegurar que ningún sector o región quedara rezagado.
La COP30 constituyó un momento crítico para intensificar la implementación de los objetivos del Acuerdo de París, en particular el cumplimiento del Primer Inventario Mundial (GST) y la evaluación de las nuevas Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC) presentadas por todas las Partes. La UE presentó su nueva NDC, que contemplaba la reducción de emisiones netas de gases de efecto invernadero (GEI) entre 66,25 % y 72,5 % respecto a 1990 para 2035, abarcando todos los sectores y tipos de GEI, con vistas a alcanzar una reducción neta del 90 % para 2040 y la neutralidad climática en 2050.
En materia de energía limpia y eficiencia, la UE promovió la transición global hacia fuentes renovables, la mejora de la eficiencia energética y el fortalecimiento de la resiliencia climática. Asimismo, impulsó la creación de la Coalición Abierta para el Cumplimiento de los Mercados de Carbono, orientada a consolidar mecanismos de fijación de precios del carbono y garantizar avances efectivos en los países y jurisdicciones participantes.
La adaptación climática constituyó otro eje prioritario, con la implementación del Marco EAU-Belém para la Resiliencia Climática Global, que permitió el seguimiento sistemático de indicadores de adaptación y fortaleció la preparación frente a riesgos climáticos. En paralelo, la COP30 abordó la financiación climática mediante la «Hoja de Ruta de Bakú a Belém», destinada a movilizar 1,3 billones de dólares anuales para 2035, con atención especial a los países más vulnerables, incluidos los Estados insulares y los países menos adelantados. En 2024, la UE y sus Estados miembros aportaron conjuntamente 31 700 millones de euros en financiación pública y movilizaron 11 000 millones de euros en recursos privados.
La participación de los miembros del Colegio de la Comisión Europea fue destacada. La presidenta von der Leyen inauguró la Cumbre de Líderes Mundiales y participó en mesas redondas sobre descarbonización industrial y transición energética. El Vicepresidente Ejecutivo Ribera intervino en foros de líderes locales, mientras que los comisarios Hoekstra y Jørgensen lideraron negociaciones y eventos sobre energía y metano, respectivamente. Además, mantuvieron reuniones bilaterales con autoridades nacionales, organismos internacionales y actores del sector privado.
La COP30 reforzó la posición de la UE como líder climático global, consolidando sus avances: desde 1990, había reducido las emisiones de GEI en un 37 % mientras su economía crecía casi un 70 %, representando actualmente solo el 6 % de las emisiones globales. La estrategia europea se apoyó en instrumentos legislativos y financieros avanzados, incluyendo precios del carbono ampliados, el Fondo Social para el Clima y los Fondos de Innovación y Modernización, asegurando un marco robusto para alcanzar la neutralidad climática y fortalecer la cooperación global hacia un desarrollo bajo en carbono.
[Este contenido procede de European Commission Lee el original aquí]






