País Vasco: En exposición pública el proyecto de vertedero de residuos no peligrosos de Artxanda
El plazo de presentación de alegaciones al proyecto del centro de gestión, tratamiento y almacenamiento de residuos no peligrosos que se ubicará en la zona de Artxanda y junto al monte San Bernabé, dentro del término municipal de Bilbao, presentado por la empresa Berriz Recycling Company, S.L., finalizará el próximo día 25 de enero. Según recoge la documentación sometida exposición pública, el centro se ubicará en unos terrenos que se han utilizado como vertedero incontrolado de todo tipo de residuos y de los que se está retirando lindano con personal y material especializado.
En la primera fase de construcción del vertedero se llevarán a cabo las obras de adaptación del terreno existente para poder albergar los residuos, ejecutando toda la red de evacuación de aguas que necesitará la instalación, que consistirá en las cunetas perimetrales que conducirán todas las aguas de lluvia que no se infiltren en el terreno, los tubos de drenaje de fondo que captarán las aguas infiltradas en el futuro terreno y la balsa de decantación que separará las aguas de las partículas de tierra que hayan arrastrado hasta ahí, para poder ser vertidas al cauce natural de forma limpia.
Con ello, se construirá un muro de contención de unos 10 metros de altura desde el terreno, en el punto bajo del ámbito de actuación. Este muro de escollera actuará como contención de todo el material depositado tras él, actuando como un dique. Al mismo tiempo, y con toda la red de drenaje instalada, se procederá a impermeabilizar el terreno. Se dispondrá un conjunto de láminas impermeables que mantendrán aislado el terreno natural existente del residuo a verter. De esta forma, la suciedad inherente del residuo depositado nunca entrará en contacto con el terreno, evitando así su contaminación, según el proyecto.
Una vez impermeabilizada la superficie del ámbito de actuación, se genera una nueva red, que consistirá en la captación de lixiviados. Parte de las aguas de lluvia infiltradas entrarán en contacto con los residuos y ésta quedará contaminada por el mismo. Dicha red permitirá la captación de dichas aguas para conducirlas a una depuradora que limpiará dichas aguas para que puedan ser vertidas a la red de saneamiento municipal.
Al mismo tiempo se ejecutará también la red de captación de los gases que generan dichos residuos. Por último, con toda la superficie ya preparada, se realizará una primera actuación de llenado. Mediante relleno de tierras se generará dentro del ámbito de actuación una plataforma llana donde se ubicará una planta de reciclaje de Residuos de Construcción y Demolición (RCD), donde materiales sobrantes de obras, como hormigón, cerámicos y similares son reciclados para futuros usos. Mientras se explota el centro de gestión, tratamiento y almacenamiento, se utilizará también esta planta para reciclaje de RCDs.
Una vez vertido todo el volumen que la vaguada es capaz de almacenar, se procederá a sellar toda la superficie mediante láminas similares a las utilizadas para la impermeabilización del vaso, y entre las cuales quedará el residuo confinado y sin contacto alguno con el terreno natura inferior ni superior. Con ello, sobre las capas de sellado se extenderá la capa de tierra natural superior a modo de cierre. Después se extenderá una capa tierra vegetal sobre toda la superficie afectada. La capa de tierra vegetal extendida permitirá la plantación de las especies de arbolado que se requieren para la recuperación paisajística del lugar.
[Este contenido ha sido reelaborado a partir de Europa Press. Lee el original aquí]