Pila ecológica que se recarga al sumergirla en agua
Una pila ecológica, fabricada sin la utilización de sustancias tóxicas ni metales pesados y que funciona tras sumergirla en el agua durante unos minutos, su nombre es AquaCell y ya está a la venta.
“Para activar la pila sólo hay que sumergirla durante cinco o diez minutos en el agua para hacer que los iones positivos y negativos se mezclen”, explicó uno de los tres accionistas suizos de la marca que distribuye la pila, Olivier Chauffat.
Esta alternativa a las pilas alcalinas está fabricada con polipropileno, un plástico cuya tasa de reciclado es del 85%, frente al 50% de las baterías convencionales, y tiene un peso ligero (12,13 gramos).
Esta pila ecológica, al contrario que las pilas convencionales que empiezan a perder su carga cuando salen de la fábrica, carece de voltaje y no emite electricidad antes de ser activada, por lo que puede ser almacenada indefinidamente, según aseguran sus fabricantes.
Estas pilas pueden ser utilizadas en aparatos con un consumo de energía medio-bajo como radio, relojes, walkietalkies, linternas con luz LED o en un mando a distancia donde tienen una vida aproximada de dos años, algo menos que una pila alcalina.