Propuesta de FEAD: Diez directrices clave para una legislación europea sobre economía circular

El sector de la gestión de residuos y recursos desempeña una doble función: es a la vez un servicio público que garantiza la protección del medio ambiente y la salud y un facilitador estratégico de una economía circular competitiva, que recupera materiales y energía y, al mismo tiempo, reduce la dependencia de Europa de los recursos vírgenes.
La Asociación Europea de Gestión de Residuos (FEAD) insta a la Comisión Europea a adoptar un enfoque audaz: uno que vaya más allá de las materias primas críticas y siente las bases de una economía europea verdaderamente circular. Uno que fomente la autonomía estratégica, apoye los ecosistemas industriales nacionales y genere empleo local.
Nuestras 10 recomendaciones tienen como objetivo abordar las fallas persistentes del mercado, impulsar la competitividad de los materiales reciclados, garantizar mercados justos y transparentes y promover la implementación y el cumplimiento efectivos en toda la UE.
Las 10 recomendaciones de políticas del FEAD:
- Impulsar la demanda de materiales reciclados mediante objetivos vinculantes de contenido reciclado, un CMUR del 25 % para 2030, incentivos económicos (exenciones del IVA, créditos fiscales) y contratación pública ecológica obligatoria.
- Crear un mercado competitivo para los materiales reciclados mediante financiación específica, reformas fiscales y normas equilibradas sobre ayudas estatales.
- Adoptar criterios de fin de residuo en toda la UE para posibilitar un verdadero mercado único de materias primas secundarias.
- Garantizar un comercio justo y la competencia aplicando cláusulas espejo a las importaciones, mejorando la trazabilidad y evitando distorsiones comerciales.
- Simplifique la tramitación de permisos y los envíos de residuos con procesos armonizados, digitalizados y acelerados en toda la UE.
- Reformar los esquemas de REP para abordar las fallas del mercado, impulsar el diseño ecológico y defender la competencia justa.
- Apoyar la conversión de residuos en energía (WtE) para residuos no reciclables e invertir en la modernización de la infraestructura.
- Gestionar las sustancias preocupantes mediante restricciones previas, descontaminación y financiación basada en que quien contamina paga.
- Reforzar la aplicación de las normas para garantizar la igualdad de condiciones y una aplicación coherente de las normas en todos los Estados miembros.
- Reducir los riesgos de incendio de las baterías de litio mediante un Fondo de Incendio de Baterías, sistemas de depósito y devolución y evaluaciones de riesgos de la UE.
El FEAD ya ha comenzado a colaborar con las instituciones de la UE para impulsar estos objetivos, incluyendo una reunión con la comisaria de Medio Ambiente, Resiliencia Hídrica y Economía Circular Competitiva, Jessika Roswall, y su gabinete el 25 de abril. Durante la reunión, el FEAD presentó sus propuestas con el apoyo de varios miembros de la Junta Directiva, representantes de algunas de las principales empresas europeas de gestión y reciclaje de residuos. Una Ley de Economía Circular bien diseñada debe ser un pilar del Pacto Industrial Limpio y responder directamente a las necesidades industriales y ambientales de la UE, como se destaca en la Brújula de Competitividad de la Comisión.
[Este contenido procede de Recycling Magazine Lee el original aquí]