El Diario Oficial de Castilla-La Mancha ha publicado este jueves el Plan Integrado de Gestión de Residuos, cuyo objetivo es reducir la generación de residuos en la comunidad autónoma y con ello minimizar los riesgos potenciales para la salud de las personas y para el medio ambiente.

El Plan pretende que los residuos generados sean gestionados en un marco de calidad ambiental, con costes económicos razonablemente homogéneos dentro del territorio y con los máximos niveles de protección ambiental exigida por la normativa y los principios de economía circular y desarrollo sostenible.

Con ello se contribuye a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y a la lucha contra el cambio climático.

RESIDUOS DE LA CONSTRUCCIÓN O DE INDUSTRIAS

El Plan Integrado de Gestión de Residuos recoge la revisión de los instrumentos de planificación autonómicos en esta materia, por ejemplo, los residuos urbanos, los procedentes de la demolición y la construcción o los residuos industriales.

Tras analizar la situación y hacer una previsión de la evolución de la generación de residuos, marca unos objetivos estratégicos como minimizar los riesgos potenciales para la salud, contribuir a la lucha contra el cambio climático y a que el crecimiento económico no vaya ligado a un mayor consumo de recursos.

También busca potenciar la valorización de los residuos como fuente de materia prima secundaria, fomentar la investigación en la gestión de residuos y concienciar a la ciudadanía en esos objetivos.

PROGRAMAS DE ACTUACIÓN

El Plan establece varios programas de actuación como los de residuos domésticos, envases y embalajes, residuos industriales, de construcción y demolición, de lodos, de residuos agrarios, de neumáticos y de aparatos eléctricos y electrónicos.

Aborda asimismo cuáles son las instalaciones existentes y las necesidades futuras y se marca como horizonte de vigencia hasta el año 2022.

FIANZA PARA LAS EMPRESAS Y CANON DE VERTIDOS

El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, explicó que, entre otras medidas, contempla la exigencia a las empresas de una fianza para hacer frente a las posibles multas por incumplimiento de la normativa ambiental.

También exige a todas las empresas un seguro de responsabilidad civil y prevé la posibilidad de que se aplique un canon de vertidos en Castilla-La Mancha.

El plan incluye un cuadro presupuestario como una estimación de prioridades y de objetivos.