Rechazo de algunas asociaciones a la implantación del SDDR
En el caso de Alemania, se ha indicado que tanto la Comisión Europea y ocho Estados miembros (entre ellos el nuestro) habían manifestado objeciones a la implantación del sistema alegando, entre otros puntos, "la aparición de barreras que restringen la libre circulación de mercancías y productos". Las asociaciones también afirman que estos sistemas en algunos países europeos no han favorecido los resultados generales de reciclado.
En contraposición, afirman que los sistemas integrados de gestión de residuos de envases (SIG) están funcionando con éxito desde 1998 y que ha alcanzado y mejorado los objetivos señalados en la Directiva de Envases y Residuos de Envases y en su correspondiente transposición en la legislación española. Así, advierten que la modificación de un método que está trabajando sin considerar la realidad social e industrial podría acarrear graves consecuencias.
Por último, las entidades han cuestionado la "pretendida bondad medioambiental" del sistema, ya que la necesidad de transporte adicional que generan los SDDR --con rutas específicas para recoger los envases en áreas comerciales y, para el caso del pequeño comercio, mediante rutas de bolseo-- suponen mayor consumo de combustible y, por tanto, un aumento de emisiones de CO2, algo difícil de apoyar contando con sistemas más baratos y medioambientalmente más eficientes.
Via El Economista
Foto de (UB) Sean R (cc)
Madrid