Un equipo del Institut Català d’Investigació Química (ICIQ) ha logrado un avance significativo en reciclaje químico de plásticos, transformando residuos domésticos de PET, como botellas de bebidas, en 4-(hidroximetil)benzoato (EHMB), un compuesto de alto valor industrial. La investigación, publicada en Angewandte Chemie International Edition, emplea un proceso de semihidrogenación catalítica que descompone selectivamente el PET en EHMB, manteniendo alta eficiencia y minimizando subproductos.

El EHMB obtenido sirve como precursor para la síntesis de fármacos, incluyendo imatinib y procarbazina, así como productos agroquímicos como el insecticida fenpiroximato. Además, puede emplearse en la producción de poliésteres reciclables, ofreciendo nuevas oportunidades para la industria de materiales sostenibles. Este enfoque convierte un residuo cotidiano en materia prima de alto valor, reforzando la economía circular y reduciendo la dependencia de recursos fósiles.

El proceso utiliza análisis espectroscópicos avanzados (CEST-NMR) para monitorizar los intermedios de reacción, optimizando la conversión y asegurando la selectividad del producto final. Según Arjan W. Kleij, jefe de grupo del ICIQ, esta metodología representa un ejemplo de integración interdisciplinaria entre química sintética y gestión de residuos, donde la ciencia aplicada permite dar nueva vida a materiales que tradicionalmente terminaban en vertederos o incineración.

Un análisis de ciclo de vida (ACV) demostró que la producción de EHMB a partir de PET reciclado tiene impactos ambientales comparables al EHMB derivado de combustibles fósiles, validando su sostenibilidad ambiental. Además, las condiciones ventajosas del proceso, junto con su escalabilidad y eficiencia catalítica, sugieren un alto potencial económico y técnico, incentivando la adopción de plásticos y moléculas circulares en la industria química.

Este avance se enmarca en la creciente necesidad de gestión integral de residuos plásticos, donde no solo se busca reducir el volumen de desechos urbanos, sino también extraer valor de los materiales post-consumo, transformándolos en insumos industriales de alta demanda. La investigación aporta un modelo replicable para otros residuos plásticos, contribuyendo a mitigar la contaminación ambiental, reducir emisiones y fomentar la circularidad de materiales en sectores farmacéuticos y químicos.

La valorización química de PET mediante semihidrogenación para producir EHMB demuestra cómo los residuos domésticos plásticos pueden transformarse en materias primas estratégicas, cerrando el ciclo de materiales y ofreciendo soluciones innovadoras para una economía circular y de bajo impacto ambiental.