La ciudad de Salamanca ha batido un nuevo récord en la recogida selectiva de envases, vidrio, papel y cartón, al llegar en 2019 a las 8.737 toneladas, un ocho por ciento más que en el ejercicio anterior, y reducir en un tres por ciento la basura domiciliaria  (49.402 toneladas en total y una media de 0,9 kilos de basura al día por habitante).

La concejal de Medio Ambiente, Miryam Rodríguez, ha presentado el informe sobre recogida de residuos, en el que se destaca que 4.406 toneladas fueron de papel y cartón, 358 más que en 2018, en envases alcanzó las 2.327 toneladas, 181 más, y la de vidrio 2.129 toneladas, 165 más que el año anterior (ambos incrementos son superiores al ejercicio anterior) a través de los 532 contenedores repartidos por la vía pública, puntos limpios y mediante el sistema puerta a puerta. Por su parte, la recogida de voluminosos aumentó en la ciudad un ocho por ciento, hasta las 29.883 unidades durante el año pasado, según los datos aportados por la edil salmantina de Medio Ambiente.

El informe también muestra que durante 2019 se recogieron 52,49 toneladas de aceite vegetal usado (aceite de cocina), a través de los 69 puntos de recogida de aceite vegetal, característicos por su color naranja. Asimismo, la ciudad cuenta con 71 puntos, repartidos por los barrios de la ciudad, donde existen contendedores, de color morado, destinados específicamente al reciclaje de ropa usada, textil y calzado de origen domiciliario.

El Ayuntamiento de Salamanca también dispone de cuatro puntos limpios (La Aldehuela, Capuchinos, Chinchibarra y El Zurguén) que el año pasado registraron un incremento del 20% en la cantidad de residuos depositados, hasta las 2.160 toneladas. Por su parte, el Punto Limpio Móvil recogió cerca de 30.000 unidades de aparatos electrónicos, teléfonos, bombillas, pilas, aerosoles, cartuchos y radiografías, un 14,5 por ciento más que el año anterior.

Finalmente, el Consistorio ha destacado "el importante incremento de los escombros depositados por los salmantinos", un 22% más, hasta 652,9 toneladas, en un año en el que el Ayuntamiento ha incrementado las medidas de prevención, vigilancia y sanción en los caminos del extrarradio para evitar el vertido ilegal de escombros y residuos.