Una nueva técnica permite transformar residuos de ganado en fertilizante para cultivos en Nicaragua

El sistema de biogás, utilizado en años recientes en Nicaragua para sustituir la leña, iluminar viviendas y ordeñar vacas, ahora también es implementado para fertilizar cultivos de café de la variedad robusta y de piña, según el PBN.
Dicho sistema es implementado con éxito en 50 manzanas agrícolas (35 hectáreas) de Nueva Guinea, al sureste de Nicaragua, ya que permitirá ahorrar más de 32.000 dólares anuales (unos 26.000€) a los agricultores en fertilizantes, plaguicidas, electricidad, combustible y mano de obra, detalló PBN, en un comunicado.
Con una dimensión de 350 metros cúbicos, el sistema biogás utilizado para la agricultura transforma las heces de vaca en gas y en un fertilizante líquido natural llamado biol, lo que permite producir energía eléctrica para el almacenamiento y bombeo de agua para la vivienda y el consumo animal, así como para irrigar los cultivos agrícolas. Para lograrlo fue necesario construir un biodigestor que genera unos 40 metros cúbicos de biogás y 6.000 litros de biol cada día, con capacidad para funcionar sin problemas durante 20 años, de acuerdo con los promotores.
Un total de 63.794 dólares (algo más de 51.000€) fueron invertidos para instalar el sistema, un dinero adquirido a través de un préstamo bancario de "línea verde", y que será recuperado en 3 años debido a los ahorros y los beneficios del mismo, indicó el PBN.
A inicios de marzo este novedoso sistema fue instalado en la zona central de Nicaragua, para ordeñar vacas y mejorar la producción con base en energía renovable. Más de un millar de familias campesinas de Nicaragua han dejado de consumir leña como fuente de energía para utilizar biogás.
El PBN, ejecutado por el Servicio Holandés de Cooperación al Desarrollo (SNV) y el Instituto Humanista de Cooperación para el Desarrollo (Hivos), cuenta con un fondo de 6.2 millones de dólares (algo más de 5 millones de euros), auspiciados por el Fondo Multilateral de Inversión (Fomin), el Fondo Nórdico de Desarrollo (NDF), y aportes locales