Abogacía del Estado pregunta si el material enviado a Palomares en 2016 aumenta el riesgo radiológico
La Abogacía del Estado ha instado a la Audiencia Nacional a que "complete" la petición de documentación realizada al Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat) y a que le pida que informe sobre si los casi 1.500 kilos de material trasladado en 2016 al área bajo vigilancia de Palomares (Almería) están clasificados como "residuo radioactivo", y si este supone "un incremento del riesgo radiológico" en la zona.
Solicita, asimismo, que se requiera al Ciemat para que aclare si incluye materiales "ajenos" a Palomares, si su presencia "afecta a la rehabilitación" de los 50.000 metros cúbicos de tierra que se prevén en el plan de limpieza aprobado en 2010 o si, en definitiva, ha supuesto una "alteración del inventario de material radioactivo" en la pedanía almeriense. En su escrito elevado a la Audiencia Nacional, de 25 de febrero, también pide a la Audiencia Nacional que interpele sobre si el transporte se hizo por "una empresa autorizada cumpliendo la normativa europea de transporte de mercancías peligrosas por carretera" y si se solicitó informe al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) "acreditando si era preceptivo".
Cabe recordar que, a instancias de Ecologistas en Acción, la Audiencia Nacional solicitó el 1 de febrero al Ciemat que le remitiese el expediente completo del traslado y almacenamiento de los casi 1.500 kilos de material radioactivo y que certificase si esta actuación contó con el informe favorable del regulador atómico. La sala de lo Contencioso-administrativo entendía así que el traslado de estos materiales es un "hecho relevante" a la hora de decidir si obliga al CSN a ejecutar el plan de rehabilitación para la zona que se aprobó en 2010, por lo que también libró oficio para que aportase el inventario de "todos los materiales radioactivos" que se encuentran almacenados en dos contenedores ubicados junto a dos balsas de riego. La Audiencia Nacional acordó, asimismo, incorporar definitivamente al procedimiento documentos presentados por Ecologistas en Acción, lo que ha provocado unas duras críticas de la Abogacía del Estado en el escrito en el que, si bien solicita también prueba, asegura que lo hace por "economía procesal" y por "respeto a la sala" ya que considera que se ha vulnerado su derecho de defensa.
La Abogacía del Estado reprocha que no se le emplazase para que propusiese prueba ni que se le diese traslado de la propuesta por Ecologistas en Acción para pronunciarse, "lo que nos estaría causando indefensión" al no cumplir el principio de "igualdad de armas". Al hilo de esto, señala que, a su juicio, el colectivo conservacionista pretende "abrir una causa general" contra el CSN y el Ciemat. La sala de lo Contencioso-administrativo ya rechazó la oposición de la Abogacía del Estado a que la Audiencia Nacional indagase sobre este traslado. Esta argumentó que este traslado "no tenía relación" con la decisión sobre el plan de rehabilitación de la zona. "Si la pretensión es que se descontamine Palomares y se pide la retirada de la tierra contaminada, tiene relación con la pretensión y es un hecho relevante que se produzca un nuevo almacenamiento en dicho lugar", indicó en su auto la Sección 7ª, que subrayó el hecho de que se supone que se "trata de tierras extraídas de ese lugar" para su análisis que "ahora vuelven al mismo es algo sobre lo que debe versar la prueba".
La Audiencia Nacional quiere comprobar la veracidad de tales hechos y "aclarar" el origen de esos materiales radioactivos a raíz de que Ecologistas en Acción pidiese una ampliación de hechos tras la "información periodística" que reveló el transporte de este material, que posteriormente fue reconocido por el propio Ciemat, que precisó que procedía los sondeos realizados en el suelo de Palomares para la elaboración del estudio de caracterización 3-D. En concreto, detalló que eran muestras directamente recogidas las 40 hectáreas contaminadas como sedimentos y suelos. Precisó que el primer envío fue el 10 de mayo y estaba compuesto de 76 cajas con diferentes muestras con peso total de 796 kilos y una actividad radiológica de 0.9 MBq (241Am) y 3.6 MBq (239+240Pu) mientras que el segundo se ejecutó el 29 de noviembre con 77 cajas con diferentes muestras, un peso total de 670 kilos y una actividad total de 0.77 MBq (241Am) 3.08 MBq (239 +240Pu). Desde el Ciemat se sostiene que tienen "muy baja actividad radiológica".