El 80% de las tortugas muertas en las costas valencianas tenían restos de plásticos
Las costas de la Comunitat Valenciana registraron el año pasado 39 tortugas varadas, de las cuales solo cuatro estaban vivas, y en las diez necropsias que pudieron realizarse se advirtió que en el 80 % de los casos había presencia de plásticos en sus cuerpos.
En 2014 se encontraron varadas o se capturaron de forma accidental en la Comunitat Valenciana un total de 58 tortugas, la mayoría de la especie de tortuga boba, salvo tres ejemplares de tortuga verde, olivácea y laúd, inmformaron fuentes de la Conselleria de Medio Ambiente.
Así consta en el informe anual que realiza la Unidad de Zoología Marina (UZM) del Instituto Cavanilles de Biodiversidad y Biología Evolutiva de la Universitat de València (ICBiBE) en colaboración con la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente.
Esta unidad coordina las actividades de recogida de cetáceos y tortugas varados en las costas valencianas, así como la gestión y almacenamiento de datos y el transporte y las actuaciones necesarias para la retirada de ejemplares.
La gestión de actuaciones sobre los varamientos de tortugas marinas se realiza en coordinación con el Centro de Recuperación de Fauna ‘La Granja’ de El Saler y el centro de recuperación de tortugas marinas ‘Arca del Mar’, del Oceanogràfic de Valencia.
Tortugas de otras latitudes
Aunque en 2014 no se ha dado un incremento importante en el número de ejemplares varados, ha destacado por la aparición de ejemplares muertos no habituales en las costas de la Comunitat, como han sido los casos de la tortuga verde (Peníscola), la olivácea (Oropesa del Mar) y la laúd (Puzol).
En concreto, ha sido de gran importancia el hallazgo de la tortuga olivácea -característica de los océanos Pacífico e Índico, y en menor medida del centro y sur del océano Atlántico-, porque es la primera cita de esta especie en todo el Mediterráneo.
La aparición de la tortuga laúd es algo más frecuente en el Mediterráneo occidental aunque en los últimos veinte años solo habían aparecido varadas, por lo que el varamiento de 2014 supone una buena oportunidad para la obtención de datos de la especie, ya que pudo realizarse la necropsia por su estado de recién muerta.
El 70 % de las 39 tortugas varadas se encontraban en los estados 4 y 5 de descomposición, por lo que solo se pudo realizar la necropsia a 8 tortugas bobas, la olivácea y la laúd.
Según las mismas fuentes, las causas de varamiento pudo ser determinada en dos de las tortugas varadas vivas, ya que una apareció enmallada y con media aleta seccionada y otra presentaba un corte en la cabeza, lo que coincide con las descripciones de colisión con hélice de una embarcación.
Necropsias
En varamientos de tortuga viva se avisa al centro de recuperación de cada provincia, mientras que las que aparecen en estado 2 (recién muerta) o 3 (muerta con los órganos intactos) son trasladadas al ICBiBE para realizar la necropsia.
A partir del estado 4 se avisa a los servicios de limpieza para que retiren los restos del animal de la playa, aunque en estos casos se trata de tomar toda la información posible sobras las causas del varamiento.
La Comunitat Valenciana lleva a cabo el marcaje de tortugas marinas desde el año 1993 con el objetivo de determinar rutas migratorias, su distribución espacial y temporal e identificar posibles amenazas.
También está sirviendo para evaluar la tasa de supervivencia de las tortugas que se rehabilitan.
En 2014, la red de atención de varamientos de cetáceos y tortugas marinas de la Comunitat recogió veintidós tortugas bobas vivas, de las que las doce que lograron superar el periodo de recuperación fueron liberadas.
Además, tres de ellas murieron en el ‘Arca del Mar’ y siete siguen aún en las instalaciones del Oceanogràfic.
Durante el año pasado también se registró la anidación de una tortuga boba en la playa de San Juan de Alicante, pero ante la afluencia de turistas se optó por trasladar el nido a la playa de la Punta del Parque Natural de L’Albufera, donde desovó 131 huevos, dos de los cuales estaban rotos.