El gobierno de EEUU interesado en recoger aguas residuales domésticas para alimentar un nuevo centro de datos
La Agencia de Seguridad Nacional de EE.UU. (NSA) parece estar interesada en recoger las aguas residuales y el subproducto de su 'tiempo de baño' con el fin de alimentar un nuevo centro de datos, a partir de una planta de tratamiento de aguas residuales en las inmediaciones. Los vecinos del Condado de Howard, Maryland ya están en alerta desde que se anunció.
Aquí nos encontramos ante una de esas situaciones de "término medio", donde por un lado tenemos que pensar en lo que es mejor para el medio ambiente, pero por otro también deberíamos estar preocupados por la violación de los derechos de privacidad por parte del gobierno.
Pero, ¿Es realmente tan malo que la NSA quiera comprar agua residual tratada con el fin de alimentar sus ordenadores en lugar de dejar que las aguas residuales se viertan en el río más cercano? De acuerdo a los críticos gubernamentales y defensores de la privacidad, la agencia está poniendo sus narices en los asuntos de la opinión pública estadounidense, sin expresar la más mínima preocupación por su opinión.
Pero desde un punto de vista ambiental el pago a la provincia de alrededor de 1.500.000€ garantiza que millones de litros de aguas residuales se traten evitando que estas mismas cantidades se viertan sin control. Es cierto que los residuos de cualquier estadounidense se podrían vender a cualquier negocio que requiera una gran cantidad de energía para la refrigeración, por ejemplo, ¿pero de este modo se vulnera realmente la privacidad? ¿o hay otros motivos para usar las aguas residuales en lugar de otras fuentes reciclables?
El nuevo centro de datos en Fort Meade, que costará a los contribuyentes 54 millones de € para su construcción, se espera que abra sus puertas en algún momento de 2016. Es posible que los motivos de los detractores logren romper el acuerdo y retrasar los planes de la NSA, pero sólo el tiempo demostrará qué posición es la más fuerte y tiene la última palabra.