El mercado de objetos usados reduce el uso de recursos naturales, el de residuos y las emisiones de CO2
Según un estudio elaborado por Segundamano.es la oferta de productos usados, es un mercado que mueve género por valor de más de 2.300 millones de euros anuales.
Este documento muestra que, en los últimos seis años, el número de personas que busca, compra y vende este tipo de artículos a través de internet se ha duplicado, lo que también es una “buena noticia” para el medio ambiente, “uno de los principales factores que ha contribuido al crecimiento de este mercado” ha explicado la responsable de estudios de esta empresa, Beatriz Toribio.
“Reutilizar, compartir o intercambiar artículos, en lugar de adquirirlos nuevos, reduce significativamente el uso de recursos naturales, el volumen de residuos y la cantidad de emisiones de dióxido de carbono derivadas de su producción”, insiste Toribio.
Se trata de un argumento importante una vez publicados los resultados del informe difundido el pasado 19 de agosto por WWF (Fondo Mundial para la Naturaleza) según el cual la humanidad agotó su “presupuesto anual ecológico” para todo 2014 en menos de 8 meses.
En ese mismo texto se advertía de que al ritmo actual de consumo para el año 2050 sería necesario disponer del equivalente a tres planetas como la Tierra para satisfacer la creciente demanda de recursos aunque, en el caso de España, en estos momentos se está consumiendo casi el triple de recursos de los que se producen cada año en el propio país.
Con objeto de concienciar a la población sobre la necesidad de adquirir hábitos más responsables, incluyendo el reciclaje y la reutilización, el informe de Segundamano.es ha calculado la cantidad de papel y madera que podría volver a usarse o dejar de producirse a partir de las ofertas que se publican anualmente en su portal de Internet.
En el caso del papel, Toribio cifra en cerca de 112.000 el número de artículos disponibles entre libros, cómics, revistas, enciclopedias y otros textos: el equivalente a 70,5 toneladas de papel. En el caso del mobiliario, son casi 130.000 productos, de los cuales podría extraerse y reutilizar 5.140 toneladas de madera. El mismo hecho de cerrar las operaciones a través de la red, sin necesidad de desplazamientos innecesarios o fallidos, ayuda a reducir los problemas medioambientales derivados del tráfico de personas y mercancías.
En ese sentido, estas empresas se alinean junto a las organizaciones ecologistas, que advierten sobre los excesos de la actual sociedad de consumo y apuestan por aplicar medidas para potenciar el reciclaje y la eficiencia, así como la compraventa de productos sostenibles.
La reutilización puede ir más allá y generar incluso un incremento de su valor gracias al “upcycling” o “supra-reciclaje”, que transforma cualquier cosa inicialmente destinada a la basura en otra de igual o mayor utilidad y de una tasación más elevada.
La primera compañía que puso en marcha esta idea a gran escala fue la norteamericana TerraCycle, que hoy trabaja en 20 países incluida España, recogiendo deshechos no reciclables que posteriormente se transforman industrialmente en nuevos productos ecológicos.