El nuevo Plan Director de Residuos busca reciclar el 50% de los desechos generados en Mallorca
La consellera de Medio Ambiente, Catalina Soler, acompañada del director insular Antoni Serra, ha presentado este miércoles el nuevo Plan Director de Residuos, que ha sido objeto de modificación, y que se marca como objetivo el reciclaje del 50% de los desechos generados en Mallorca.
El texto, que ha sido aprobado en Comisión Informativa General y de Cuentas del Consejo de Mallorca, se llevará a aprobación inicial en el pleno previsto el día 8 de enero y posteriormente se abrirá un periodo de alegaciones de tres meses.
Soler ha destacado la gran labor realizada en materia de residuos durante estos años y ha afirmado que este plan cierra el círculo de la gestión que se inició a principios de legislatura. Una gestión que ha calificado de "seria" y "responsable", y que se ha llevado a cabo con transparencia y con el máximo consenso de todos los partidos políticos con representación en el Consell de Mallorca, así como de las entidades ecologistas y los sectores implicados, con el que se ha trabajado conjuntamente en las diversas Mesas de residuos donde todas las partes estaban representadas.
La consellera ha explicado que el nuevo Plan Director de Residuos de Mallorca, que tendrá una vigencia de cinco años, engloba en un solo texto lo que hasta ahora eran los residuos urbanos (RSU), y los voluminosos y neumáticos (RCD).
Entre las principales líneas de actuación, Soler ha destacado tres ejes fundalmentales: la reducción en la generación de residuos, el aumento de la recogida selectiva y la apuesta por la eficiencia técnica y económica en la gestión ambiental.
El texto revisado, que regirá la gestión de los residuos hasta el año 2020, contempla la reducción de un 10% de los residuos y el reciclaje en recogida de un 50% de los desechos generados en la isla.
Como ha explicado Soler, esta es una de las grandes diferencias con los anteriores planes, los cuales se redactaron con previsiones de crecimiento en la producción de residuos, una circunstancia que supuso la construcción de nuevos hornos e instalaciones.
ADELANTO DEL CIERRE DE LOS HORNOS
En este sentido, Soler ha destacado la posibilidad de adelantar el cierre de los hornos de incineración correspondientes a las líneas 1 y 2, previstos en 2025, y que, según ha dicho, se podría fijar para 2017.
También se introducen nuevas medidas de aproximación al principio de "quien contamina paga", todo ello con la creación de tarifas específicas (lodos, residuos de origen animal y fracción orgánica) para que cada residuo pague en función de su coste. Al mismo tiempo, se incide en las responsabilidades de los productores con nuevas definiciones para los residuos producidos por el sector empresarial, comercial e industrial, que en estos momentos se consideran residuos municipales.
Entre las novedades, cabe destacar también la liberalización del tratamiento de residuos como la materia orgánica o los lodos, dando así la posibilidad a empresas o entidades locales para que puedan gestionar los su propios residuos, a fin de facilitar su reciclaje y compostaje, y abrir nuevas alternativas económicas. ep