Un importante informe de la ONU indica que podría resultar casi imposible abordar el problema de los microplásticos en el océano, pero una mejor gestión de los residuos plásticos es un primer paso importante. Un grupo de expertos de las Naciones Unidas, que trabaja en los aspectos científicos de la protección del medio marino, instó que el desarrollo de una medida de reciclaje basada en la economía circular sería la acción más eficaz y más barata para conseguir reducir la cantidad de microplásticos -pequeñas partículas de menos de 5 mm de diámetro- que se acumulan en el océano.

El primer estudio global sobre la procedencia de los microplásticos y su impacto en el medio ambiente, concluyó que se necesitan con urgencia políticas eficaces para conseguir reducir la cantidad de plástico que termina en el océano.

Sin embargo, incluso si todos los vertidos de plástico cesaran de inmediato, el problema de los microplásticos persistiría, debido a la continua fragmentación de las bolsas de plástico, botellas y otros residuos tirados en el océano.

Los científicos explican que es poco probable que una solución técnica rentable que permita la extracción a gran escala de cantidades significativas de microplásticos, se pueda desarrollar. Por lo tanto, cualquier propuesta será ineficaz, siempre que los plásticos y microplásticos sigan entrando en el océano.

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